El centro de Monterrey se llena de nuevos desarrollos que ofrecen “repoblar” la zona, hablan de sustentabilidad y un nuevo estilo de vida, pero los precios en los que se venden estos departamentos son prohibitivos para la mayor parte de la población.
La construcción de edificios de departamentos creció un 32 por ciento este año de acuerdo con datos de la firma Softec, sin embargo, la compra solo ha crecido un punto porcentual, al pasar de tres a cuatro por ciento de aceptación.
En 2018 había 32 proyectos de este tipo registrados en el área metropolitana, este año ya van 90.
Hay ya una cantidad importante de unidades habitacionales listas para ocuparse sin que haya un comprador de por medio; incluso aquellos que tienen ya varios años ofertándose siguen sin llegar a más del 50 por ciento de su capacidad total, sin embargo, eso no frena a los constructores.
Mientras tanto, urbanistas e inversionistas describen un futuro cercano donde los servicios estén a disposición de los usuarios sin necesidad de usar el coche; hablan de usos mixtos, de los mercados artesanales, todo ello en una zona centro con un problema grave de congestión vehicular producto de la mala planeación de las rutas de transporte urbano.
Esos camiones en los que van las personas que trabajan en San Pedro Garza García, pero viven en Juárez o Apodaca. En un centro donde las banquetas están ocupadas por comerciantes informales, a los que las autoridades no han terminado de retirar cuando ya se están instalado en otros sitios; en donde las grandes avenidas como Félix U. Gómez tienen obras inconclusas y en calles del emblemático Barrio Antiguo lucen con trabajos de servicios públicos inacabadas y en franco abandono.
Volvamos a los costos…. ¡Vivir en las alturas a precios por los cielos!
Parece que la nueva buena vida está solo a disposición de quienes puedan pagarla, la pregunta obligada es: ¿Les interesará dejar sus fraccionamiento con guardia de seguridad? ¿Sus cocheras y patios para compartir pasillos y “amenidades”?
Twitter:@dameluna