La comunidad del lenguaje nos empareja y los usos nos segmentan, pero no nos hacen únicos. Pueden usar la ropa de la talla y de la marca que quieran, que les agrade o que refleje su posición social, pero siempre será lo mismo: pantalón, camisa, corbata, calcetines, camiseta, calzones y zapatos. Y unos gastarán más que otros en estos artilugios, porque tienen más dinero para ello, pero siempre son las mismas prendas.
De la misma manera, muchos leen a Baudelaire, Rimbaud Bukowski, algo de Whitman, y no leen a Eliot, Pound o Williams. Leen a los Beat, pero no a la Generación del 27. Leen lo que les recomiendan porque no investigan, no saben qué buscar ni para qué. Leen lo que cae en el cono de su visión si les fue recomendado.
Leen y luego escriben lo que les quedó de resabio, regurgitándolo. La poesía lírica, porque todos los que escriben poemas son poetas líricos, no son épicos ni dramáticos, es la poesía de hoy. Baudelaire y Rimbaud eran poetas líricos; no estaban influenciados por Whitman, sino por Virgilio, Alighieri, Cavalcanti… por esos sus poemas tienden a la perfección de su expresión. En cambio, Ginberg y Bukowski estaban influenciados por Whitman y su desparpajo poético, su enumeración caótica y su escritura taquigráfica.
No llegaron al verso que proponía Olson, que es más moderno en cuanto técnica, pero tradicional en sus contenidos.
Pues si los temas son los mismos a lo largo de la historia de la literatura, lo novedoso debe de ser la técnica, afirmaba Benjamin, sin pensar que las estructuras del idioma, del lenguaje, son fijas, estables, que hace falta el genio para ejercer otras estructuras que digan lo que el poeta descubre mediante la imaginación.
Porque el instrumento primordial del poeta es la imaginación, no el lenguaje.
La imaginación, no el verso, aunque lo adjetiven de libre.
Hay muchos poemas que son solamente paráfrasis de algunas frases poéticas de otros autores que han leído por recomendación. Lecturas en abstracto y sin dirección
Porque no todo se puede decir en verso, hay poemas que solamente son prosa recortada.
La función poética jakobsiana es una hipótesis, una propuesta, que no aplica a todo ni explica por qué un texto común puede ser poético.
Últimamente he leído varias paráfrasis de unos versos de Bukowski: “Como dijo Dios, cruzándose las piernas, veo que he creado muchos poetas, pero no tanta poesía”. Así que quienes piensan todavía en la relación necesaria y directa entre leer y escribir, en ese orden, son unos perfectos idiotas.