Para que no haya sospecha de que lo contado en un relato es parte de la experiencia del autor se le cataloga bajo el rubro de “Literatura”.
Lo que significa la palabra “literatura” es “no es verdad”, “puede parecer verdad, pero no lo es”, e incluso puede querer decir “puedes pensar que quiero engañarte al decirte que esto no es vedad, pero la verdad es que no es verdad”.
Parece que el lector, sobre todo el que tiene mentalidad del Romanticismo, piensa que el autor cuenta su vida, o su vida es referencia indispensable, por lo que la novela, el relato, revelan una parte que el autor no desea dar a conocer de manera voluntaria.
El análisis estilístico buscaba esa parte no consciente del autor que se expresaba en sus letras, al igual que en el habla se hacen presentes los lapsus.
En todo escrito, se sabe, hay una serie de lapsus que revelan la personalidad oculta de quien escribe, la que se revela ante una lectura concienzuda de un lector atento.
Hubo, en ese sentido, teóricos literarios que temían que los lectores acuciosos descubrieran sus tendencias privadas al leer sus textos y por ello inventaron la figura de “el yo poético”, “el yo literario”, para deslindar lo escrito de su vida personal.
Tal actitud pasó a los autores, que vieron en ello la posibilidad de objetivar a priori lo que escribirían; de eso a la invención de las historias sólo dieron un paso y con él el cambio radical de la literatura.
A partir de ese momento, todo fue invención. Se inventaron las historias, los cuentos, los relatos, los poemas. Se dio, con ello, un cambio en el paradigma literario, pues se dejó de lado la inspiración y en su lugar se interpuso la invención.
La invención, parte del proceso científico, tomó el lugar de la literatura y, consecuentemente, ¡la literatura dejó de ser literatura!
Se le había liberado de las reglas que le daban consistencia y unidad, y con ello se perdió su esencia.
Habría que preguntarse por la esencia de la poesía, para entender que, aunque está hecha con la palabra, no es lenguaje; la palabra no es lenguaje. El lenguaje es un concepto teórico, un elemento del conocimiento al que se le dio una categoría abstracta para sacarlo del mundo del habla, que es el mundo en el que circula la poesía, para que, al igual que la categoría de “literatura”, no se rozara con la vida personal de quien lo estudiara.
Ya hablaré sobre la confusión entre lenguaje y habla.