Los océanos producen la mitad del oxigeno que hay en el mundo. Absorben 30 por ciento del dióxido de carbono que se genera con la actividad humana(PNUD).
Representan la principal fuente de proteínas de aproximadamente cuatro de cada 10 habitantes del planeta.
Más de 3 mil millones de personas a nivel mundial dependen para su sustento de la biodiversidad marina y costera.
Aunque los océanos tienen un rol esencial para la vida en el planeta, veremos cómo nuestras acciones los afectan.
Primero, basura que termina en el mar
Cada año, 13 millones de toneladas de plástico llegan a los océanos. Lo que provoca la muerte de más de 100 mil especies marinas anualmente (ONU, 2019)
Se estima que 640 mil toneladas de redes para pescar están abandonadas en los mares. Los animales corren peligro porque los atrapan o mutilan, en lo que se le conoce como “pesca fantasma” (ONU, 12/05/17).
En tres décadas habrá más plástico que peces en los océanos y 99 por ciento de todas las aves marinas lo habrán consumido.
Segundo, ¿verse bien contamina?
En los mares existen cerca de 51 billones de microesferas de plástico provenientes de cosméticos, pasta de dientes o exfoliantes. Esa cantidad supera 500 veces a las estrellas que hay en la galaxia (EFE, 23/02/17).
Al lavar una prenda hecha con telas sintéticas, se desprenden 700 mil microfibras que van al agua. En el océano actúan como esponjas que absorben otros contaminantes, se vuelven más tóxicas y los animales marinos las ingieren (Greenpeace, 02/03/17).
Tercero, el asesino silencioso
Al año se producen 5.6 billones de cigarros con filtros hechos de acetato de celulosa. Es una especie de plástico que tarda más de 10 años en descomponerse. Dos de cada tres los tiran en cualquier lugar y pueden llegar a los mares (Fortune, 28/08/18).
En 2017, la organización Ocean Conservancy recolectó 2.4 millones de colillas en zonas costeras del mundo. Fue el principal artículo que se juntó, más que envolturas o popotes.
Una colilla puede contaminar hasta 50 litros de agua. Desprenden algunos de los 7 mil químicos que tiene un cigarro. Al menos 50 de éstos son cancerígenos para los humanos y otros son tóxicos como el arsénico, metales pesados o pesticidas (rtve, 06/08/18 y OMS, 2017).
La Agencia de Protección Ambiental de EEUU comprobó que, por su toxicidad, los filtros de cigarro que pasaron 96 horas en agua salada o dulce mataron a la mitad de los peces de la muestra.
Cambiar nuestros hábitos y tomar conciencia sobre los desechos que generamos, así como a dónde van a parar, ayudará a aminorar un poco la devastación que hemos generado en los océanos.
Hay que estar conscientes que esos niveles de contaminación ponen en riesgo a millones de especies y a la humanidad.