Opinión
Carlos Albert
Carlos Albert
  • Juegos moleros y… juegos guacamoleros

    Me queda claro que cuando el deporte no está supeditado a cuestiones meramente económicas y mercadológicas, cuando quienes administran el deporte y entienden la relevancia que tienen los principios
  • ¿Y el protocolo, 'apá'?

    Lo he comentado en varias ocasiones, pero el tema es tan serio que no lo soltaré mientras en la Liga "Muy X" no lo tomen con la seriedad que amerita este asunto, me refiero al protocolo de manejo p
  • Futbolistas… ¿sobrevalorados?

    Día a día sorprenden las noticias que nos informan de esas cantidades multimillonarias que se mencionan al hablar de la compra o la contratación de los futbolistas, no pasan 24 horas sin que esas c
  • ¡En la madre!...

    Es lo que deben estar pensando los federativos de nuestra extraordinaria, magnífica y excelente FMF, dirigida y administrada por Decio de María y Enrique Bonilla, ahora que la situación política se
  • El efecto Trump en el futbol mexicano

    Cuando un gorila se escapa de su jaula y se lanza a la calle sin freno, poderoso y asustado, lo más probable es que a su paso deje una ola de desastres de todo tipo, unos más graves y delicados que
  • Carta abierta al señor Miguel Ángel Mancera

    Señor Mancera:Es del conocimiento público que tanto usted en su calidad de jefe de Gobierno de la Ciudad de México, como Horacio de la Vega, director general del Instituto del Deporte de la
  • Eso fue un baile

    No hay pretextos ni excusas, Tigres le dio un repaso y una lección de futbol al América. Fue tal el dominio y la superioridad, que llegó el momento en que Pablo Aguilar y Paolo Goltz, impregnados d
  • El mundo al revés

    Eso es el futbol mexicano y muchos de sus protagonistas, por ejemplo:1. El Sr. López Chargoy, que dice que nunca infringió el reglamento, ya que sus jugadores aceptaron que
  • La poco seria Liga “Muy X”

    Se mantiene y se regodea entre sus inmundicias, pobres tontos que viven entre las sombras, asustados y miedosos ante su mismísima pasividad y escudándose en su ¿afición? por algún equipo. Esos que