La Real Academia Española de la Lengua afirma en su quinta definición que reto es “Objetivo o empeño difícil de llevar a cabo y que constituye por ello un estímulo o un desafío para quien lo afronta”.
Se asocia muchas veces los retos a la juventud, idea con lo cual difiero.
Considero que pertenecen únicamente a quienes se apropian de ellos. Sin importar edad, condición social, complexión, credo o color.
Hay infinidad de personas comunes o famosas que hicieron retos, rompieron paradigmas, marcaron records e hicieron la diferencia.
Cuando cumplimos un reto, por sencillo que este sea, podemos percatarnos de cómo se mueve una serie de elementos que están en nuestro entorno.
Se generan pensamientos positivos, acciones y sensaciones ocultas o desconocidas. También se pueden descubrir nuevas visiones.
Escribo esto porque me pasó con una empolvada idea. Limpié una y cien veces mi bicicleta, imaginando que en ella iría a la nieve, a tiendas, cafés y a casas cercanas de mis primos y amigas.
Una tarde, invité a una amiga a tomar un café a un kilómetro de mi casa. Sin más, limpié de nuevo mi bici, la monté y me fui.
El camino que tantas veces hice en auto era diferente sobre dos ruedas. Debía ser más cuidadosa sin la coraza de metal. El viento cálido me acompañaba.
Observé árboles, colores y casas que nunca había descubierto en el mismo camino transitado desde hace por lo más de un lustro.
Disfruté mucho la experiencia, el café y la charla con mi amiga. Supe que apoyé de manera minúscula a no contaminar; vi la bici estacionada frente a mí y me felicité en silencio.
Estuve atenta de acciones que antes pasaba por alto.
Observé cómo el sol se oculta sin prisa, disfrutando segundo a segundo, sabiéndose dueño y señor de sí; vi el movimiento de las nubes y el cielo regalar de manera generosa otra noche. Era la señal que debía regresar a casa.
Después le compré espejo, luces y accesorios, mismos que aguardan en un cajón, impacientes de su estreno.
Confieso, quiero buscar nuevos retos, y romper paradigmas.
La edad es sólo un número, un estado mental. Mi odómetro avanza, pero la energía es joven.
Tengo una gran lista de pendientes, retos y proyectos.
¿Cuáles son tus retos? Saberlo es fácil, hacerlos, también.