Disfruto muchísimo ver los campos naturales de girasoles y los adornos florales con ellos. Me parecen simples, elegantes, bellos y enigmáticos.
Para conocer un poco más de ellos y de su simbolismo, leí algunos artículos, en especial quería saber sobre la escala de Fibonacci.
Los girasoles están asociados con la alegría, la esperanza, el positivismo, la longevidad, la resistencia y con días soleados.
En el lenguaje de las flores, regalar girasoles significa demostrar fidelidad y lealtad, cuando los regalas, le dices a quien los recibe que es parte importante de tu vida y su cercanía te genera felicidad.
Son sinónimo de alegría pura, de una relación bonita y duradera.
Tiene varios simbolismos como el amor y la admiración, la vitalidad, el positivismo y la energía.
En la cultura china simboliza una larga vida, fortuna, riqueza y buena suerte.
Hay quienes atribuyen al girasol un simbolismo espiritual, pues el heliotropismo, es decir, su movimiento siguiendo al sol representa un modo de vida feliz y una búsqueda constante de luz, de iluminación y de amor al sol.
También representa a Dios en la cultura azteca.
Me gustó lo que leí de la mitología griega, que cuenta que la ninfa Clytia se enamoró de Apolo, el dios del Sol, pero no fue correspondida.
Ella sufrió muchísimo y murió de amor por él, convirtiéndose en un girasol que seguía al sol todos los días para demostrarle su amor infinito.
Es sorprendente saber que cuando no hay suficiente luz solar, estas flores se ponen frente a sí para abastecerse de energía positiva. Constituyen además, al igual que las abejas una comunidad de gran orden y disciplina.
Es innegable la similitud de los girasoles con el sol, y hasta forma parte de su nombre.
Los girasoles están presentes en el arte como la cinematografía, en la pintura y la música.
Los cinéfilos pensarán de inmediato en la bella película italiana “Los girasoles de Rusia” dirigida por Vittorio De Sica, con Sophia Loren y David di Donatello.
Los seguidores de Vincent van Gogh asociarán a varios cuadros de girasoles de este pintor. Y quienes admiren a Luis Eduardo Aute recordarán sin duda a su bella canción “Giraluna” (https://www.youtube.com/watch?v=c31fBPLtY3M).
La riqueza de estas flores es enorme, faltan otros elementos importantes, entre ellos como su centro se apega a la escala de Fibonacci, al que me referiré en la siguiente entrega.