¿Qué pasa cuando se junta una de las más grandes leyendas de Hollywood con los escritores de “The Sopranos” y “Yellowstone”, con los directores de “The Walking Dead” y “Stranger Things” y con los fotógrafos de “Terminator: Salvation” y “Cobra Kai”?
Una serie impresionantemente buena que usted no se puede perder. Se llama “Tulsa King” (“El rey de Tulsa”) y se distribuye a un ritmo de un capítulo por semana en Paramount+.
¿Y de qué gran leyenda de Hollywood estamos hablando? De Sylvester Stallone.
¿Sabe usted el privilegio que es ver hoy al gran protagonista de clásicos como “Rocky” y “Rambo” haciendo una serie?
Obviamente el señor no está jugando, eligió con mucho cuidado la historia, se rodeó de magníficos talentos y hasta se metió de productor para garantizar que esto iba a tener su sello.
Sí, el del modelo de los anuncios de “te hace falta ver más box”, el de ese hombre que se burla de sí mismo parodiando su mal carácter, su fuerza bruta y con un sentido del humor muy especial que le funciona a él y solamente a él.
“Tulsa King” es como las legendarias series premium de finales de los años 90, principios de los 2000, que narra las aventuras de un mafioso neoyorquino que sale de la cárcel después de haber purgado una condena de 25 años.
Su meta es recuperar todo lo que perdió en ese tiempo y volver a ser una estrella de la mafia.
Sólo que hay un “pequeño” problema: la realidad, hoy, es muy diferente a como era hace un cuarto de siglo y él no es precisamente un adolescente.
Por si esto fuera poco, ya no hay lugar para él en Nueva York y la mafia lo manda a un “pueblo bicicletero” a comenzar de nuevo.
¿Sabe usted la bomba de ideas y de emociones que es esto? Porque por un lado tenemos todo lo que implica la creación de un imperio del mal, pero, por el otro, tenemos material para dar y regalar.
Quiero que se imagine la cara de ese personaje luchando por violar la ley en un mundo donde hay tiendas que venden marihuana como si fueran golosinas y en un momento de uber, celulares e internet.
No y ni hablemos de lo que pasa cuando nos metemos con el contraste entre el campo y la ciudad, ni con lo mucho que han avanzado las cuestiones de género desde 1998 porque entonces sí no acabamos nunca.
“Tulsa King” es muy chistosa, muy entretenida, pero al mismo tiempo, y si usted la quiere ver así, muy profunda, muy inteligente.
A mí me encanta porque ahora ya casi no hay series chistosas y porque las que pretenden ser inteligentes, confunden arrogancia con intelectualidad y el resultado es una catástrofe que le está dando al traste a la industria entera.
En efecto, es un poco como “Los Soprano” hoy y eso se agradece porque ni HBO ha podido igualar eso y aquí sí, y me fascina toda la parte amorosa, sexual.
No le voy a vender trama para no arruinarle la experiencia, pero aquí hay una parte femenina muy atractiva y que a diferencia de lo que vemos en otros lados, no se ve puesta para quedar bien con las mujeres. Es de verdad.
Mire, ni perdamos el tiempo ni con el nivel de las actuaciones ni con los valores de producción. Esto es excelente. Ya lo demás es un tema de gustos personales.
Luche con todas sus fuerzas por ver “Tulsa King” en Paramount+. Le va a gustar. De veras que sí.
Álvaro Cueva