Me da mucha pena escribirle del final de Doña Flor y sus dos maridos, que se transmitió el viernes pasado, porque estamos hablando de un proyecto que no se debió haber hecho jamás. Como ya le había dicho, no es ni para México ni para el público de Televisa. Y me da pena porque si la analizamos lo único que vamos a encontrar es gente buena en todas las áreas, talentos a los que no les quedó de otra más que obedecer.
Si hacemos garras este título, aunque no queramos, terminaremos perjudicando a actores, escritores, directores y productores que merecen seguir regalándonos grandes telenovelas. Si fingimos demencia, Televisa seguirá minando el futuro de la ficción mexicana, de Las Estrellas y de una parte fundamental de nuestra cultura pop.
¿Qué se hace en estos casos? Decir la verdad, pero insistiendo en ese punto en donde están los errores. El final de Doña Flor y sus dos maridos fue una experiencia insignificante, porque a pesar de inmensas participaciones como la de Sylvia Pasquel, acabó traicionando la irreverencia de su planteamiento original. ¿O no?
¡Maravilloso!
Quiero felicitar a Telemundo Internacional. ¿Sabe usted lo que va a hacer? Va a estrenar hoy, a las 20:00, Eva la trailera. Estamos hablando de la última telenovela protagonizada por nuestra queridísima Edith González (q.e.p.d.). Sí, Telemundo Internacional le va a hacer un homenaje a Edith con este lanzamiento panregional. Está en los anuncios.
Eso es tener corazón, ser agradecido, saber hacer las cosas. ¡Bravo, Telemundo Internacional! Ojalá que Televisa, que tiene un archivo impresionante de producciones de Edith, se ponga las pilas y reaccione pronto. Me parece imperdonable que tenga que ser una televisora extranjera la que le ponga el ejemplo al consorcio de Emilio Azcárraga y más después de la cadena de penosos escándalos que salieron de sus pantallas por problemas de ética periodística.
De Tv Azteca no hablo, porque fueron los primeros en homenajear a Edith y porque ya no pasan telenovelas. Nos vemos a la noche en Telemundo Internacional. Nos vemos a la noche con la gran Edith González.
¡Error!
No entiendo qué pasa en Imagen Televisión. Terminó Un poquito tuyo, un melodrama cómico, un espectáculo de producción propia con actores conocidísimos, una telenovela familiar, dinámica, bonita. ¿Y qué no pusieron en su lugar? Lo peor de la televisión turca: Amor y odio. Sí, yo sé que hay un nicho muy respetable de gente que adora esta clase de emisiones, pero vamos a decirnos la verdad: Amor y odio es como eran las telenovelas mexicanas de 1973. ¡Hace millones de años que superamos esos esquemas!
Si hoy Televisa hiciera un programa la mitad de lento, predecible, acartonado, solemne, poco familiar y tedioso que ése, la opinión pública se le iría a la yugular. No entiendo cómo le hacen estos señores ni para programar ni para comprar sus latas, están traicionando a sus audiencias y va a llegar un punto en que la gente se canse. No tengo nada contra la tv turca. Estoy molesto con Imagen. Estas cosas no se deben hacer. ¡No.