Es impresionante lo que se puede hacer con empeño y voluntad política. Los oaxaqueños tenían años de no tener una época de paz. Durante la administración de Gabino Cué la entidad no conoció la tranquilidad. El ahora ex gobernador dejó ser a los miembros de la sección 22 de la CNTE y los seudomaestros se daban gusto. Esta organización pretendió someter al nuevo gobernador, José Murat, pero no tenía idea de que el mandatario iba a sentarse de la mesa con los líderes del magisterio y dio instrucciones al IEEPO para que recontratará a 3 mil 700 maestros despedidos.
Escucha la opinión de Francisco Garduño, columnista de Milenio.