Enrique Ochoa Reza participó en la Reforma Energética como pocos lo hicieron: desde su concepción.
Economista por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), abogado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y doctor en Ciencia Política por la Universidad de Columbia, en Nueva York, su carrera ha estado íntimamente ligada al sector energético, aunque no se limita a este terreno, también fue consejero electoral en el IFE y trabajó en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Entre 1997 y 1999, fue asesor del secretario de Energía, Luis Téllez. Esta experiencia fue clave para ser nombrado por el presidente Enrique Peña Nieto como subsecretario de Hidrocarburos en diciembre de 2012.
Desde esa posición, encabezó el grupo técnico que redactó la Reforma Energética que el gobierno federal presentó al Poder Legislativo en agosto de 2013.
Continuó con el apoyo a la apertura del sector desde la Comisión Federal de Electricidad (CFE), de la que fue nombrado director general en febrero de 2014.
Una vez aprobada la Reforma Energética, Ochoa se ha encargado de transformar a la CFE para hacerla competitiva en el nuevo escenario nacional donde empresas privadas podrán competir en la generación de electricidad. El reto no solo es en competencia sino también en mejora interna: la nueva ley la convirtió en una empresa productiva del Estado que deberá diversificar su oferta y modernizar su producción.