Las reformas tributarias ayudaron a incrementar las ganancias netas de la compañía aproximadamente 87%, en comparación con las del año anterior, para llegar a 44,900 millones de dólares (mdd), incluso cuando se alejó de los tipos de mega adquisiciones por los que es conocido y cuando su negocio de seguros se enfrentó a una serie de catástrofes, entre ellas los huracanes en Estados Unidos y Puerto Rico, y los incendios forestales en California.
El patrimonio neto de Berkshire se incrementó más de 65 mdd en 2017. Buffett escribió en su carta anual a los accionistas que “2017 distó mucho de ser lo habitual: una gran parte de nuestra ganancia no provino de nada de lo que lográramos en Berkshire. Sin embargo, la ganancia de 65,000 mdd es real, estén seguros de eso. Pero únicamente 36,000 mdd provinieron de las operaciones de Berkshire. Los 29,000 mdd restantes nos los entregaron en diciembre cuando el Congreso reescribió el código fiscal de EU”.
Si bien la reforma fiscal de EU detonó una serie de fusiones a principios del año —con uniones multimillonarias como las que se acordaron hace unos días entre la empresa Blackstone y Thomson Reuters, y JAB Holding y Dr Pepper Snapple— Berkshire estuvo ausente.
“En nuestra búsqueda de nuevas empresas independientes, las cualidades clave que calificamos son fortalezas competitivas duraderas: gestión capaz y de alto nivel, buenos rendimientos sobre los activos tangibles netos que se requieren para operar el negocio; oportunidades para un crecimiento interno con rendimientos atractivos y, por último, un precio de compra sensato”, escribió.
“Este último requisito resultó ser una barrera para prácticamente todos los acuerdos que revisamos en 2017, con precios para empresas decentes, pero que distan de ser espectaculares, que alcanzaron máximos históricos. De hecho, el precio parecía casi irrelevante para un ejército de compradores optimistas”.
Buffett, quien recibirá a los accionistas en mayo en Omaha para la reunión anual de la compañía, agregó que los banqueros de inversión que “huelen enormes comisiones” y los ejecutivos que se imaginan mayores remuneraciones, a menudo aplauden ese tipo de transacciones que evita Berkshire.
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Las negociaciones se realizan a un ritmo ágil desde el auge de las puntocom del año 2000, con más de 550,000 mdd en fusiones y adquisiciones propuestas en lo que va del año, según Dealogic. Y las empresas de capital privado están dispuestas a soltar el dinero por sus objetivos. El precio promedio a ingresos múltiples sobre acuerdos este año está en un nivel récord.
Los inversionistas y los analistas esperan un gran trato de Buffett desde que Berkshire y el grupo brasileño de capital privado 3G Capital no consiguieron el año pasado un acuerdo de 143,000 mdd con Unilever. Berkshire acumuló más de 114,000 mdd de lo que se conoce como fondo, una fuente de capital que surge de las primas de seguros que recauda y que luego la compañía utiliza para financiar compras de capital y adquisiciones corporativas.
[OBJECT] El sábado, Buffett dijo que Berkshire “tendrá que hacer una o más adquisiciones enormes”. En el informe anual de la compañía, que se publicó el mismo día, Berkshire reiteró que busca adquisiciones de entre 5,000 y 20,000 mdd en tamaño, aunque Buffett y Charlie Munger, el vicepresidente de la compañía, dijeron que en el pasado acuerdo se podría estirar mucho más allá de esas cifras.
El ascenso de Greg Abel, el director ejecutivo de Berkshire Hathaway Energy, y Ajit Jain, jefe de reaseguros del grupo con sede en Omaha, los inversionistas lo interpretaron como un respaldo para un futuro líder del grupo de 500,000 mdd que incluye a Fruit of the Loom, Geico, NetJets y Lubrizol.
Las preguntas sobre la sucesión estuvieron dando vueltas durante mucho tiempo en la compañía, la cual se encuentra entre los 10 mayores grupos que cotizan públicamente en EU, y la noticia de que Buffett se retiraría del consejo de administración de Kraft Heinz, confirmó que el inversionista multimillonario continuaría reduciendo sus responsabilidades que tienen relación con Berkshire.
Kraft Heinz, del que Berkshire Hathaway adquirió una participación mayoritaria junto con el grupo brasileño de capital privado 3G, citó que la decisión de Warren Buffett de reducir sus compromisos de viajes, se debe a su partida. Recordemos que el empresario tiene 87 años y Munger tiene 94.
