La venta de vehículos pesados en el país enfrenta un bache, ya que en abril se comercializaron un total de 2 mil 871 unidades, que comparadas con las 3 mil 272 registradas en el mismo mes de 2017, representan una caída 12.3 por ciento, dio a conocer la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact).
Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la asociación, indicó que el mercado interno en México se enfrenta a nuevos retos como la aplicación de nuevas normatividades (con la aprobación de la NOM 044), el robo al autotransporte en carretera, así como un problema estructural en la renovación de la flota que impide que los pequeños y medianos transportistas adquieran nuevas unidades.
En abril la venta al menudeo fue de 3 mil 227 unidades, 98 más que las unidades comercializadas en el mismo mes de 2017, lo que significa un incremento de 3.1 por ciento; sin embargo, en las ventas acumuladas al menudeo hubo ventas de 12 mil 402 unidades.
Durante el primer cuatrimestre las ventas al mayoreo acumularon un total de 10 mil 875 unidades, lo que significó un descenso del 4.8 por ciento.
Ante la problemática de renovación vehicular, el presidente de Anpact reiteró la necesidad de contar con incentivos para la adquisición de las nuevas tecnologías, esquemas atractivos de financiamiento segmentando por tipo y tamaño de transportista.
Asimismo hizo un llamado a la profesionalización del manejo del negocio del micro y pequeño transportista, demandó la actualización permanente del marco regulatorio y la efectiva supervisión normativa que asegure que las unidades cumplan con su ciclo de vida.
CPR