Toyota Motor gastará 10 mil millones de dólares en inversiones de capital en Estados Unidos durante los próximos cinco años, igualando las realizadas por la automotriz japonesa en los cinco años anteriores, afirmó el presidente ejecutivo para Norteamérica, Jim Lentz.
La firma recibió críticas del presidente electo, Donald Trump, por anunciar en 2015 sus planes para trasladar la producción de su modelo Corolla a México desde Canadá.
Lentz dijo en entrevista durante el Salón del Automóvil de Detroit que la decisión no es una respuesta a Trump, sino parte de la estrategia de negocio de la compañía para invertir en Estados Unidos, donde tiene 10 plantas en ocho estados.
Lentz aseguró que la planificación de la nueva planta de México comenzó unos dos años antes de ser anunciada en 2015. Agregó que se trata de decisiones a largo plazo y que no ha hablado con Trump.
Los 10 mil millones de dólares incluyen la nueva sede de Toyota en Norteamérica, que es construida en Texas, además de grandes mejoras en sus plantas.
Lentz afirmó que Toyota planea ampliar algunas de sus plantas en Estados Unidos durante los próximos cinco años, pero declinó decir si eso impulsará el empleo. Toyota, que da trabajo en la actualidad a 40 mil personas en Estados Unidos, añadió más de 5 mil empleos en el país en los últimos cinco años, indicó.
El presidente de Toyota, Akio Toyoda, hablará más tarde este lunes para publicitar el nuevo modelo Camry y sus planes de inversión.
Lentz dijo que "todos" coinciden con los objetivos de Trump de impulsar las manufacturas y el empleo en Estados Unidos, en parte porque "nos ayuda a vender más autos (...) Todos estamos a favor de lo que está intentando hacer", señaló. "Debemos llevar nuestro negocio como uno global. Tengo que asegurarme de que somos competitivos".
MCM
