El paquete económico para 2017 que presentó la Secretaría de Hacienda (SHCP), en general, fue bien recibido por los bancos, toda vez que consideran que tiene los elementos suficientes para estabilizar el nivel de deuda del país; sin embargo, coinciden en que el reto está en cumplir.
El presupuesto para el siguiente año destaca el objetivo de lograr un superávit primario de 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y un recorte al gasto de 1.2 por ciento. Para las diversas instituciones financieras que operan en el país, no hubo muchas sorpresas.
Para el área de estudios económicos de BBVA Bancomer, en términos generales, el paquete económico es adecuado y debiera ser suficiente para que la deuda pública como porcentaje del PIB se estabilice el año entrante.
“La posible estabilización de la razón de deuda a PIB en 2017 y una eventual reducción a partir de 2018 constituyen elementos indispensables en un contexto en el que los incumplimientos de los últimos años restaron flexibilidad a las finanzas públicas”, señaló.
Si bien Bancomer considera que se trata de un buen paquete, señaló que hubiera sido deseable un recorte al gasto superior a 1.5 por ciento, toda vez que eso enviaría un mensaje de que se está haciendo un esfuerzo adicional.
Enfatizó que en los últimos tres años, los objetivos planteados no se han cumplido, lo que llamado la atención de los mercados y las agencias calificadoras.
Ernesto Revilla, director de Estudios Económicos de Banamex, dijo en un estudio que la principal pregunta es si esta vez México alcanzará el objetivo de consolidación fiscal, dado que el gasto no ha estado por debajo del presupuestado desde 2002.
Recortar el gasto en 1.2 por ciento del PIB en solo algunas líneas del presupuesto es de por sí difícil, especialmente en un entorno político local complicado, con elecciones en el Estado de México en 2017, dijo Revilla.
MCM