Toyota invertirá mil 300 millones de dólares para modernizar su planta de automóviles en Kentucky, en el último movimiento que realiza una automotriz mundial para impulsar su gasto en Estados Unidos en respuesta a las presiones de la administración Trump.
La inversión forma parte de un paquete de 10 mil mdd que la automotriz más grande de Japón ya se había comprometido a invertir en EU en los siguientes cinco años, ya que la industria automotriz navega cuidadosamente a través de la nueva realidad que plantea la política de “Estados Unidos Primero” del presidente Donald Trump.
Si bien gran parte de sus gastos ya estaban planeados, el paquete, que anunció en enero, se produjo después de que Toyota se volvió blanco de las críticas de Trump en Twitter sobre sus planes de inversión en México.
Otros fabricantes de automóviles, entre ellos General Motors y Ford, ya tomaron una postura preventiva similar con una serie de compromisos de inversión en Estados Unidos, incluso cuando parte del gasto se hubiera dado de todas maneras.
Para destacar la naturaleza política de su anuncio, el comunicado de Toyota incluyó comentarios preparados de Trump donde elogia la inversión: “La decisión de Toyota de invertir mil 300 millones de dólares en su planta de Kentucky es una prueba más de que los fabricantes ahora confían en que el ambiente económico mejoró notablemente bajo mi administración”.
La planta de Kentucky es la más grande de Toyota en el mundo y el año pasado produjo 500 mil vehículos y emplea a 8 mil 200 personas. El año pasado sumó 700 empleados, anticipándose al lanzamiento de la nueva versión de su exitoso sedán Camry.
“Esa importante transformación le permitirá a la planta mantenerse flexible y competitiva, sentando nuevas bases para nuestra presencia en Kentucky”, dijo Wil James, presidente de Toyota Motor Manufacturing, Kentucky.
El grupo automotor japonés moderniza las líneas de producción y equipos en todas las plantas que tiene en el mundo, ya que desarrolla una serie de modelos para los próximos años utilizando plataformas y componentes renovados para los vehículos.
El segundo mayor fabricante de automóviles del mundo espera que la nueva tecnología de producción permita a la compañía ser lo suficientemente competitiva en costo y ágil para responder a los cambios del mercado.
Como parte de la actualización, la compañía ya anunció que invertirá 600 mdd y sumará 400 puestos de trabajo en su planta de Princeton, Indiana. El mes pasado, la compañía también dijo que planea invertir 240 millones de libras para modernizar su planta de Reino Unido en Burnaston, Derbyshire.