El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) ajustó a la baja sus proyecciones de crecimiento para la economía mexicana, de 0.3 a 0.1 por ciento en 2019; y de 1.25 a 1.10 por ciento en 2020, por lo que hizo un llamado a las autoridades para generar condiciones propicias para la inversión.
En conferencia con medios, el presidente nacional de IMEF, Fernando López Macari, destacó que si bien la caída de los inversión en agosto fue menor que la de julio, a 4.6 por ciento anual desde 7.6 por ciento, durante las últimas semanas ha habido señales que restan confianza en la inversión.
Entre éstas, indicó, se encuentra el cambio del periodo de la gubernatura de Baja California a cinco años; la bienvenida del presidente electo de Argentina, Alberto Fernández, cuya reputación en sus políticas con el sector privado de su país es muy cuestionable; y la apresurada felicitación ante el aparente triunfo de Evo Morales en la presidencia de Bolivia, así como el acelerado ofrecimiento de asilo político “restan credibilidad al gobierno de México”.
Lejos de recesión
Pese a este contexto, el IMEF descartó que se vaya presentar una recesión en el país, pues por un lado no se han dado dos trimestres consecutivos de caídas en el Producto Interno Bruto (PIB), ni tampoco se cumple la definición más generalizada pues, entre otros elementos, hay empleo y hay resultados positivos en las ventas al menudeo.
Gabriel Casillas añadió que a esto se suma que el próximo año se prevé más positiva, puesto que ya habrá pasado el primer año de gobierno y se espera mayor inversión tanto pública como privada.
MRA