GlaxoSmithKline se comprometió a no solicitar la protección de patentes de sus medicamentos en países de bajos ingresos como parte de las medidas que adopta el grupo farmacéutico del Reino Unido para ampliar el acceso a sus productos en el mundo en desarrollo.
Las propuestas permitirán que los fabricantes de genéricos puedan producir copias de bajo costo de los medicamentos de GSK en los países pobres sin correr el riesgo de entrar en disputas legales.
El grupo farmacéutico dijo que introduce un "enfoque gradual" a la propiedad intelectual bajo el cual puede defender sus patentes en países de altos y medianos ingresos, pero que progresivamente va a flexibilizar las protecciones en las zonas más pobres del mundo.
Andrew Witty, director ejecutivo de GSK, dijo que la protección de propiedad intelectual se mantiene como un incentivo vital para la inversión en la investigación y desarrollo, pero que se necesita un enfoque más flexible para lograr satisfacer la creciente demanda mundial de cuidados de salud.
GSK es líder entre los grandes grupos farmacéuticos en los esfuerzos para ampliar el acceso a los medicamentos en el mundo en desarrollo. El anuncio del jueves parece indicar el intento de Andrew de cimentar su legado antes de dejar el cargo el próximo año, después de casi una década como director ejecutivo.
Cualquier producto de GSK en la lista de medicamentos esenciales de la Organización Mundial de la Salud quedará disponible libremente para que los fabricantes de genéricos los puedan producir en países clasificados como los menos desarrollados o con menores ingresos.
Eso cubrirá más de 60 por ciento de los países en África, así como varios en Asia, incluidos Afganistán, Bangladesh y Nepal.
En los países de ingresos medios-bajos, que van de Pakistán y Filipinas a Georgia y Guatemala, GSK puede registrar las patentes de sus medicamentos, pero buscará llegar a acuerdos de licencias con los fabricantes de genéricos por una pequeña cuota de regalías.
GSK busca una protección total de propiedad intelectual —que evita la competencia de productos genéricos hasta que expire la patente— en sus productos en los países de ingresos medianos y altos, así como los miembros del grupo del G 20 con las economías más importantes.
Eso incluye a las grandes economías emergentes de China, Brasil y la India. Este último está en un campo de batalla de feroces disputas sobre la propiedad intelectual entre la industria farmacéutica y los productores locales de medicamentos genéricos.
GSK también dijo que va a ofrecer cualquier medicamento contra el cáncer que desarrolle a la Medicines Patent Pool (MPP), una iniciativa con respaldo de la ONU mediante la cual la industria farmacéutica emite de manera voluntaria licencias a los fabricantes de genéricos en el mundo en desarrollo.
Hasta el momento la MPP se centra en tratamientos para VIH, tuberculosis y hepatitis C, pero Andrew dijo que también hay una creciente necesidad de terapias contra el cáncer más asequibles en los países pobres.
"La experiencia que tiene GSK con la Medicines Patent Pool con Tivicay —el nuevo medicamento para VIH y uno de nuestros productos de mayor éxito comercial— nos da la confianza de que aumentar el acceso, el incentivo para la innovación de manera adecuada y lograr el éxito del negocio pueden ir de la mano", dijo.