Los líderes empresariales intercambiaron golpes por las reglas de la Unión Europea, y Carolyn Fairbairn, directora de la CBI (Confederación de la Industria Británica), desestimó como “ejemplos tontos” lo que presentaron los euroescépticos para justificar el brexit.
John Longworth, copresidente de Salir Significa Salir, dijo a los parlamentarios que cree que abandonar la Unión Europea será una oportunidad para reducir “10 por ciento” las regulaciones, con la que se recortarán los costos para las empresas. Longworth, ex director general de la Cámara de Comercio Británica, dijo al comité selecto del brexit que los choferes de camiones están enojados, “ya que no pueden tener más tiempos extra debido a las regulaciones. También citó a un fabricante de salmón ahumado que dijo que sus latas tenían que incluir la etiqueta de “puede incluir pescado”.
Pero Carolyn Fairbairn, directora general de CBI, respondió: “Debemos tener cuidado de no elegir ejemplos tontos... necesitamos considerar adecuadamente los costos y beneficios”.
Fairbairn dijo que los reglamentos que rigen a los choferes comerciales “los inventó Reino Unido” y la Road Haulage Association los respaldó. Dijo que muchos miembros de la CBI tenían “grandes preocupaciones” acerca de las diferencias del etiquetado después del brexit, porque ya es uno de los costos más grandes.
Pero Longworth dijo que empresas más grandes suelen respaldar a la Unión Europea debido a que les resulta más fácil negociar con Bruselas. “La desregulación a menudo es lo más importante para las pequeñas empresas”, dijo.
En privado, un parlamentario dijo que a Longworth, quien ahora representa a un grupo de defensa en lugar de a uno empresarial, se le invitó a hablar con el comité porque fue muy difícil para ellos encontrar organizaciones que pudieran argumentar sobre los beneficios empresariales de salir de la Unión Europea. Por su parte, Frances O’Grady, jefa del TUC, advirtió que la reducción de regulaciones puede tener consecuencias para los trabajadores.
Fairbairn dijo que la CBI argumentó en contra de salir de la Unión Europea, ahora está “en el negocio de lograr lo mejor del brexit”. Dijo que el grupo tenía cinco exigencias principales para el proceso de salir, incluidos acceso sin barreras al mercado único, acceso a “talento y personas cualificadas”, equivalencia regulatoria, los mejores acuerdos comerciales posibles en el mundo y la protección de prestaciones económicas y sociales. Cuando se le preguntó específicamente acerca de las consecuencias de dejar la unión aduanera, dijo que hay “puntos a favor y en contra”.
Señaló que algunos miembros expresaron que salir de la unión le permitiría a Gran Bretaña “realizar sus propios acuerdos comerciales”. Pero agregó: “Hay preocupación sobre los trámites, la burocracia, las barreras arancelarias y las normas. Para algunos sectores es un tema casi tan importante como los aranceles”.
El problema de la unión aduanera surgió repetidamente en las preguntas del primer ministro con Emily Thornberry, secretaria sombra de Relaciones Exteriores, que presionó al gobierno acerca de si Reino Unido debería permanecer dentro. “Sería un desastre para Gran Bretaña si no seguimos como parte de la unión aduanera”, dijo a la Cámara de los Comunes.