Los valores chinos cayeron de nuevo, ya que las preocupaciones sobre la salud de la economía volvieron a poner nerviosos a inversionistas y funcionarios internacionales.
Las caídas llegan cuando muchos economistas e inversionistas esperan que la Reserva Federal de Estados Unidos aplace sus planes para endurecer la política monetaria en su crucial reunión para fijar las tasas de interés el jueves, principalmente por las crecientes preocupaciones sobre China y la turbulencia que provocó.
El índice de referencia Shanghai Composite cayó 2.7 por ciento y el Shenzhen Composite, que se enfoca en pequeña capitalización, cayó 6.7 por ciento. Para los dos índices, fue la peor sesión desde el 25 de agosto.
Mientra tanto, los inversionistas recibieron decepcionados un plan muy esperado para reformar las infladas empresas chinas de propiedad estatal. Durante el año anterior aumentó la expectativa de que las acciones de muchas de las empresas de propiedad estatal tuvieran beneficios, y cuando el plan resultó ser de menor alcance de lo que muchas personas esperaban, los inversionistas aprovecharon el momento para asegurar los beneficios.
La caída del precio de las acciones de ayer también llega en medio de la creciente inquietud entre los inversionista extranjeros de que la desaceleración de China es peor de lo que se pensaba, y les preocupa que las medidas que tomaron las autoridades de Pekín para estabilizar el mercado de valores y reactivar la economía general están fracasando.
“Todavía no está claro si la respuesta política en China será suficiente... para disipar las preocupaciones sobre (su) incidencia en la economía mundial”, escribieron los analistas de Deutsche Bank en un informe.
Durante el fin de semana hubo más malas noticias, cuando se dieron a conocer los datos del domingo que mostraron que las inversiones en activos fijos para el año hasta finales de agosto registró la tasa más baja de crecimiento en 15 años. El crecimiento de la producción de manufactura también se mantuvo cerca de su nivel más débil en una década.
Las preocupaciones latentes sobre China también pesaron ayer en los mercados financieros de occidente, el FTSE Eurofirst 300 cayó por tercer día consecutivo y el S&P 500 de EU también perdió terreno.
Algunos economistas e inversionistas argumentaron que la Reserva Federal, ante las señales de debilidad en la economía mundial, deben aplazar el alza de las tasas. Los futuros de las tasas de interés indican que solo hay una probabilidad de 30 por ciento para que el banco central de Estados Unidos eleve las tasas el jueves, y algunos operadores apuestan a que mantendrá su tasa de referencia casi en cero hasta 2016.
Las acciones de las grandes empresas chinas que cotizan en bolsa tuvieron un repunte tardío en los últimos 40 minutos del día de operación. Eso igualó el patrón en las últimas semanas, cuando el “equipo nacional” de instituciones financieras estatales intervino durante la última hora de operaciones para frenar las pérdidas.
La tarde del viernes, la Comisión Reguladora del Mercado de Valores de China anunció castigos para dos ricos inversionistas individuales por manipular 13 acciones, al usar falsas órdenes de operación para aumentar temporalmente los precios. Eso hizo temblar ayer a los especuladores de corto plazo.