La situación que viven las micro, pequeñas y medianas empresas en el norte del país, particularmente en Coahuila y Durango, se visualiza complicada para el presente año que comenzó.
A decir del vicepresidente nacional zona norte de Canacintra, el lagunero Mario Lozoya, el impacto que ha vivido este segmento empresarial, las obligará a ser más competitivo, capacitándose y certificándose para poder sobrevivir en el mercado nacional e internacional.
Aseguró que afortunadamente, no se prevén despidos en las empresas.
"Dicen que las oportunidades se dan cuando hay años malos, pero considero que este tendrá que ser mejor".[OBJECT]
"El anuncio de inversiones a nivel Estatal, si bien en La Laguna se ve poca inversión, la que llega no es lo que quisiéramos, tanto el Parque Solar en Durango y el eólico en Coahuila".
"Para la micro y pequeña industria, somos las que más batallamos, ya que no hay incentivos y no hay apoyos", lamentó.
Y aunque visualizó la esperanza que el 2016 sea mucho mejor, dijo que espera que se mantengan las promesas de la energía, los precios de los combustibles con la fluctuación de +3%, a pesar de que el IEPS (Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios), subió en el precio del diesel.
Indicó que como empresarios, la mayoría de las pequeñas y medianas empresas las maneja el propio dueño o socio, que tiene que enfrentar todo para que pueda seguir creciendo.
A diferencia de las grandes empresas, donde ya se tienen los capitales mejor estructurados, los recursos económicos y humanos para tener toda una planeación.
Para ello, dijo, las empresas tienen que trabajar aún más en certificarse, ya que en la actualidad si no se está certificado con ISOS es complicado ser proveedor de las medianas y grandes empresas.