Las necesidades de los nómadas digitales pasaron a otro nivel. Hoy, este grupo de personas que viajan por todo el mundo mientras realizan sus actividades laborales a distancia, están en busca de espacios habitacionales donde puedan despejar su mente sin distracciones, llenarse de inspiración, pero, sobre todo, convivir con otros profesionales que se encuentren en su misma situación.
Gustavo Tomé, experto en el sector inmobiliario, explicó que estos trabajadores pasan estancias de corto o medio plazo en distintas ciudades, por lo que requieren de viviendas que satisfagan sus necesidades, las cuales son muy simples pues trabajan de forma remota, así que no quieren contratos de renta o establecerse por mucho tiempo en un mismo sitio.
“Para cubrir estas demandas surge el coliving, que es un espacio en donde se integra el trabajo y la vivienda. Se trata de un concepto que ofrece a los nómadas digitales lugares para habitar a precios accesibles, pero con la posibilidad de crear comunidad y aprovechar sitios de entretenimiento, coworking, recreativos y hasta de actividades wellness”, detalló el también presidente del Consejo de Fibra Plus, la primera FIBRA de México que compite a través del desarrollo inmobiliario
Espacios para un nuevo estilo de vida
Gustavo Tomé menciona que la tendencia de trabajar de manera remota ha llevado a las personas a adoptar un estilo de vida de nómada digital, dando impulso a nuevas formas de habitar un espacio.
Así como sucedió con la aparición del coworking, que llegaron a revolucionar las oficinas al ofrecer espacios colectivos de trabajo, en los que se reunían profesionales con necesidades similares, ahora los coliving se están convirtiendo en una forma moderna de vivienda compartida entre los nómadas digitales.
El experto en la industria inmobiliaria refiere que “es normal que los jóvenes se muden con personas afines para crear una comunidad inspiradora, pero sin perder su individualidad, por eso los espacios de coliving están creciendo, ya que cada persona tiene su habitación privada, totalmente amueblada, pero con acceso a sitios comunes especialmente diseñados para crear un entorno de interacción y se puedan compartir experiencias, como la cocina, el salón de descanso, la terraza, el gimnasio, etcétera”.
Una de las principales ventajas de los espacios de coliving, de acuerdo con Gustavo Tomé, es que básicamente son lugares que facilitan la estancia de los nómadas digitales, ya que el proceso de alquiler es bastante sencillo, sin mucho papeleo, y las estadías pueden ir desde un par de meses hasta años.
Y, además de que cuentan con todos los aditamentos para tener una permanencia agradable en cualquier sentido, se generan redes de trabajo que pueden resultar favorecedoras en la vida de los profesionales, añade Gustavo Tomé. Por eso no es de extrañarse que este modelo de vivienda se esté esparciendo rápidamente alrededor del mundo.
Una tendencia que va en aumento
Ante el boom de los trabajadores remotos, las alternativas como los coliving irán en aumento. “El trabajo es cada vez más cómodo, por lo que muchas personas deciden viajar mientras lo realizan. Pero lugares como hoteles, hostales o viviendas rentadas ya están perdiendo su atractivo, así que estamos por experimentar un auge en el coliving”, advirtió el también presidente del Consejo de Fibra Plus.
Pese a las predicciones, aún falta mucho por desarrollar, pues en este momento el coliving -a pesar de ser una gran alternativa para nómadas digitales- es costoso porque sigue siendo considerado como una oferta exclusiva para un pequeño grupo de la población.
“Pero esto irá cambiando en los próximos años. Cada vez más personas dejarán la oficina para apostar por el trabajo remoto, esto va a obligar al sector a crear espacios de vivienda compartida a precios más accesibles (...) Todavía hablamos de una realidad emergente, pero ya están llamando la atención de inversionistas e inmobiliarias, así que el futuro de los coliving se vislumbra prometedor”, aseguró Gustavo Tomé.
FMU