Puebla ocupa el primer lugar en la producción de flor de cempasúchil característica de la temporada alusiva al Día de Muertos, cuyo valor de producción se traduce en más de 42.9 millones de pesos anuales.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Desarrollo Rural, el nombre de esta flor proviene del náhuatl “Cempohualxochitl” que significa: flor de 20 pétalos.
“En la época prehispánica, los mexicas asimilaban el color amarillo de esta flor con el sol, por ello, la utilizaban en los altares, ofrendas y entierros dedicados a sus muertos”.
La cosecha de esta flor representa 15 mil toneladas al año, principalmente Atlixco, que es el municipio con mayor superficie sembrada en todo el país con 325 hectáreas.
La flor de cempasúchil aparece en la temporada de lluvias, a tiempo para adornar las tumbas y ofrendas dedicadas a los seres queridos de las familias poblanas.
Por su color característico, la flor se utiliza para obtener colorante natural para teñir objetos, prendas o alimentos; en la avicultura suele utilizarse para alimentar a las aves con el fin de que la piel y la yema de los huevos aumenten su coloración amarilla.
La materia prima también se ocupa para elaborar cervezas artesanales, nieves, pulque, además que tiene usos medicinales, principalmente para el tratamiento de padecimientos digestivos, fiebre e incluso enfermedades respiratorias como la tos.
El estado de Puebla también se caracteriza como el segundo productor anual de flor de terciopelo con más de 220 mil 627 manojos en 129 hectáreas cosechadas, lo que alcanza un valor de 5.3 millones de pesos.
La flor que se siembra en los campos poblanos se encuentra en colores como el amarillo pálido, anaranjado o púrpura intenso.
mpl
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