Aunque México ha tenido tasas de crecimiento relativamente bajas, entre 1.8 y 2 por ciento, el Banco Mundial considera que las políticas monetaria, fiscal y estructurales llevarán a un mayor dinamismo, y en un difícil contexto externo, el país ha hecho las cosas bien.
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"No es fácil resolver el problema estructural en México. Mi exposición es que en México no ha sido por falta de intentar, creo que México es un país muy serio que ha tratado de hacer reformas estructurales serias", señaló en conferencia de prensa el economista en jefe del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, Carlos Végh.
Explicó que es difícil separar el hecho de que quizá las reformas estructurales no han dado tanto resultado en el corto plazo como se hubiera esperado, con la incertidumbre política por otro lado, por lo qué hay que darle "un poco de tiempo al tiempo", para ver cómo se resuelve la incertidumbre política y ver a partir de ahí qué pasa.
"Mi sensación es que creo que México está haciendo las cosas bien, dentro de un contexto doméstico doméstico e internacional muy complicado", pues no hay que olvidar que 80 por ciento de las exportaciones mexicanas va a Estados Unidos y que el peso mexicano se depreció en unos cuantos meses, lo que significa que el país ha tenido que responder a una situación que no ha sido fácil, pero que "ha enfrentado bien", sostuvo el economista del Banco Mundial.
Para 2018, el consenso de expertos consultados por el organismo estima que México presentará una tasa de crecimiento económico de 2 por ciento
CPR
