Los propietarios de las patentes aduanales José Francisco Conde Abreu y Miguel Hipólito Caballero Aupart, negaron ser extorsionados por autoridades federales para realizar actividades de comercio exterior en la frontera de México y al mismo tiempo, desconocer a la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) como representantes de sus empresas involucradas en esta actividad.
En una carta entregada a MILENIO, los empresarios del sector con sede en Matamoros, rechazaron ser víctimas de un delito por elementos de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) y de su oficina central.
De la misma forma, aseguraron cumplen con las obligaciones fiscales correspondientes ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), tras una suspensión provisional por hechos imputables.
La compañía “Tramitología en Comercio Exterior del Noreste” forma parte de una de las agencias aduanales con funciones en dicho municipio en Tamaulipas negó categóricamente “ser parte de extorsión alguna, desconocemos a la Concanaco a cualquier otra organización que se autodenomina representante de nuestros intereses en México en el extranjero, como el origen de esta información falsa. Nadie solicitó la intervención de la Concanaco para presentar queja alguna”.
También explicó que "dentro del ámbito en que me desarrollo, transportista, colegas y personal que labora en la agencia tuvieron conocimiento de la patente aduanal suspendida y estaba en su regularización. Se logró exitosamente y sin dar alguna dádiva o ser coaccionado de manera alguna por particulares o la propia autoridad".
Desconocen los casos
A su vez, Miguel Hipólito Caballero Abreu apuntó que no difundió los hechos que afirman se cita una extorsión por autoridades centrales adscritas en la Agencia Nacional de Aduanas, menos del área central.
“Desconocemos a la persona de nombre Enrique Cordero, no existe un trato de amistad o de trabajo con esa persona, no sabemos si un funcionario público”, explicó en la referida aclaración.
A su vez, expusieron que en su momento se suspendió la patente por hechos imputados. Cumplieron con la normatividad y con los papeles en regla volvieron a prestar sus servicios.
"Por nuestra cuenta reactivamos esa patente, nunca requerimos de la Concanaco o algún intermediario para realizar este trámite", puntualizó.
Como agregado, se indicó que el personal de la Canaco tenía conocimiento que Conde Abreu y Caballero Aupart realizaban el procedimiento, al ofrecer en diversas ocasiones sus servicios de asesoría y apoyo para agilizar la reactivación de la patente. Los socios destacaron que nunca se contrataron los servicios de la Cámara y la acción se dio con transparencia y conforme a las disposiciones fiscales.
Por último, específica que la mencionada Confederación no representa los intereses de las agencias.
Aquí la carta de posición de réplica completa