Julieta Garibay abrió su primera cuenta corriente a los 20 años. En ese momento, ella trabajaba como camarera y ahorraba para ir la universidad.
También era una migrante que vino de México a Austin, Texas, con su madre y su hermana cuando tenía 12 años. No tenía documentación para residir legalmente en Estados Unidos.
Por varios años, Garibay descartó la idea de abrir una cuenta de cheques por su estatus migratorio. Ella guardaba el efectivo que le pagaban en una bolsa de papel que metía en el refrigerador o debajo de su cama.
"Tenía miedo que si diera mi información, el gobierno lo averiguaría y me deportaría", dice Garibay, ahora cofundadora y directora de campaña de United We Dream, un grupo de ayuda para jóvenes migrantes.
Con el prospecto del pago de una matrícula universitaria, su bolsa de papel ya no funcionaría. Así es que abrió una cuenta en el Bank of America, donde su mamá -también una migrante sin autorización en aquel entonces- ya tenía una cuenta.
¿Para qué sirve una cuenta de cheques?
La decisión de Garibay de abrir una cuenta estuvo motivada porque ella iba a la universidad a vivir por sí sola. Se mudaba a Dallas y tenía que alquilar un apartamento, obtener un teléfono y pagar cuentas. Estas tareas son más fáciles de hacer, y a menudo más baratas, con una cuenta de banco.
Cuando alguien no tiene una cuenta bancaria recurre a servicios de cambio de cheques o tarjetas de débito prepagas que generalmente cobran cargos altos por cambiar los cheques y por pagar cuentas. Estos servicios son gratis cuando usted tiene una cuenta de banco.
Una cuenta bancaria también ofrece seguridad personal.
"Muchas comunidades migrantes reciben pagos en efectivo y llevan todo su salario semanal en efectivo. Eso es muy peligroso", dice Mayra Aldás-Deckert, asociada de proyectos especiales de la Coalición de Inmigración de Nueva York.
Las personas que guardan su dinero en casa en una bolsa de papel, como lo hacía Garibay, pueden sufir un robo sus ahorros de una semana o de un mes. Y las noticias reportan un patrón de robos dirigido a jornaleros y a otros migrantes a través del país; con suficiente efectivo en sus bolsillos, estos trabajadores son vistos como "cajeros automáticos ambulantes".
Una cuenta bancaria es un sitio seguro para guardar el dinero. Incluso en el caso de que el banco sea robado, el dinero está asegurado y se devolvería a los usuarios. Y, teniendo menos efectivo, la gente no es tan vulnerable a los ladrones de calle.
La cuenta de banco también ayuda al migrante sin documentación para vivir en Estados Unidos a establecer una trayectoria financiera. En la mayoría de los casos, se requiere una cuenta de banco para abrir una tarjeta de crédito, comprar una casa o pedir un préstamo para comenzar un negocio -toda actividad que establece un historial crediticio.
Lo que se necesita para abrir una cuenta
Primero, empecemos con lo que no se necesita: un número de Seguro Social. Muchos bancos y asociaciones de crédito permiten a sus clientes abrir una cuenta con un Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN, por sus siglas en inglés).
"Si no tiene un número de Seguro Social, es absolutamente necesario que consiga un ITIN", dice Marisabel Torres, una analista económica en el Consejo Nacional de La Raza que trabaja en un proyecto de la organización para fomentar la creación de patrimonio. "Si usted trabaja, es importante tener documentación de que ha pagado impuestos y tiene un historial en el país."
El Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés) emite números de ITIN a las personas que trabajan en los Estados Unidos, pero no son aptos para recibir un número de Seguro Social. Para conseguirlo, se debe completar el formulario necesario y presentar un comprobante de identidad, como el pasaporte o la licencia para conducir, junto a la declaración completa de impuestos federales.
Se puede enviar una solicitud por correo, llevarla a una oficina del IRS o a un agente tramitador del IRS para procesarla.
Antes de abrir una cuenta, los bancos y asociaciones de crédito necesitan verificar la identidad del usuario. Para hacerlo, normalmente, ellos exigen los siguientes documentos:
-Pasaporte no vencido.
-Licencia de conducir emitida por el gobierno, incluyendo licencias extranjeras.
-Tarjetas de identificación consular.
-Certificado de nacimiento.
Aquellos que vivan en la ciudad de Nueva York, en San Francisco, o en cualquier otra ciudad que emita tarjetas de identificación municipal, pueden usar estas como comprobante de identidad.
Los bancos y asociaciones de crédito a menudo requieren una dirección postal para abrir una cuenta. Una factura de servicio público, contrato de alquiler o licencia de conducir actualizada o tarjeta de identificación municipal también puede satisfacer este requisito.
Cualquier persona sin documentos para residir en Estados Unidos y que abra una cuenta puede sentirse atemorizada, pero es algo que se puede vencer. Esto no sería causa de una deportación, como lo descubrió Garibay, de United We Dream. Sin embargo, sí ayuda a establecer un historial financiero en Estados Unidos y ofrece un sitio seguro para guardar los ahorros que tanto cuesta ganar.
AER