El jefe del gobierno de Cataluña, Artur Mas, emplazó hoy a los independentistas a transformar en votos la movilización que tuvo lugar el viernes en Barcelona, donde cientos de miles de personas reclamaron la secesión de la región española, coincidiendo con el inicio de la campaña electoral catalana.
"Esto no está ganado. Sería un error monumental pensar que esto ya está hecho (...) Sin una mayoría clara no hay camino de futuro", dijo en referencia al proceso que pretende iniciar a partir del 27 de septiembre si los secesionistas logran al menos 68 de los 135 diputados del Parlamento catalán.
Además, Artur Mas, pidió hoy al Ejecutivo de Mariano Rajoy que "abra los ojos" ante la movilización independentista que tuvo lugar el viernes en la región del noreste de España, coincidiendo con el inicio de la campaña de los comicios del 27 de septiembre.
Mas, principal impulsor del proceso con el que pretende "desconectar" Cataluña de España, lamentó la "poca altura de miras" del Ejecutivo español ante una manifestación "sin parangón", según dijo hoy en un acto celebrado en Barcelona.
La multitudinaria manifestación celebrada el viernes en la capital catalana bajo el lema "Vía libre a la República Catalana" es la cuarta de este tipo que se repite un 11 de septiembre, coincidiendo con el día de la Diada, la fiesta oficial de Cataluña.
Este año tuvo lugar en un ambiente especialmente politizado, al celebrarse a dos semanas de las elecciones catalanas, que Mas pretende convertir en un plebiscito sobre la independencia. Entre los asistentes hubo representantes de las dos fuerzas independentistas que concurren a las urnas, la coalición Junts pel Sí (Juntos por el Sí), en la que Mas es número cuatro en la lista de candidatos, y la CUP.
El gobierno de Mariano Rajoy acusó al jefe del Ejecutivo catalán de convertir la Diada en un "acto electoral". "Ante un reto democrático con mayúsculas como el de ayer, hay que responder con altura de miras, y eso es lo que falta en Madrid", respondió hoy Mas.
La manifestación provocó hoy otras reacciones en España, coincidiendo con el segundo día de la campaña electoral catalana. "Fue un espectáculo vergonzoso", expresó la presidenta del gobierno de la región de Madrid, Cristina Cifuentes, uno de los valores en alza del Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy.
El candidato de la formación conservadora al gobierno catalán, Xavier Garcia Albiol, hizo un llamamiento a los ciudadanos catalanes no independentistas para que acudan a las urnas en septiembre.
"Ayer se llenó la (avenida) Meridiana (de Barcelona) con hombres y mujeres que quieren la independencia, pero lo importante es llenarla el 27 de septiembre con hombres y mujeres que apuestan por la convivencia y por la concordia (en España)", dijo en un acto público. "Vamos a decirle a Mas que Cataluña es de todos los catalanes. No es su cultura, su lengua, sus instituciones", dijo también el socialista Pedro Sánchez.
Desde Ciudadanos, partido nacido hace una década en Cataluña con vocación antinacionalista y hoy en auge a nivel nacional, advirtieron a Mas de que otros muchos catalanes se manifestarán a final de mes "en las urnas". "Ahora nos toca a nosotros", dijo el líder de la formación, Albert Rivera.
Catalunya Sí que es Pot, coalición afín al partido de izquierda Podemos, hizo hincapié en el carácter democrático y pacífico de la marcha y lamentó las críticas vertidas por el partido de Rajoy. "Hubo ayer más democracia en las calles de Barcelona que en la boca de los dirigentes del PP", dijo su candidato en Cataluña, Lluís Rabell.
Artur Mas reiteró el viernes que si las fuerzas políticas secesionistas alcanzan la mayoría absoluta de escaños en el Parlamento catalán, se iniciará un proceso hacia la independencia de Cataluña en un plazo de año y medio.
Rajoy ha advertido en varias ocasiones en los últimos meses que no permitirá que la región se independice de España y que pondrá todos los medios a su alcance para impedirlo.