Al menos cuatro personas, entre ellas dos soldados de la misión de la OTAN en Afganistán, murieron hoy en un tiroteo en el interior de una base de las fuerzas de seguridad afganas en la sureña provincia de Helmand, informaron fuentes oficiales.
Dos hombres vestidos con uniformes de las Fuerzas Nacionales Afganas de Defensa y Seguridad (ANDSF, siglas en inglés) abrieron fuego contra el vehículo en el que viajaban los soldados de las tropas internacionales a primera hora de la mañana, informó en un comunicado la misión de la Alianza Atlántica en el país, "Apoyo Decidido".
Ambos atacantes perecieron bajo el fuego de respuesta de las fuerzas de la OTAN, detalló la misión, para agregar que investigan el suceso en colaboración con las fuerzas de seguridad afganas. El ataque se produce en medio de la ofensiva talibán de primavera, iniciada a finales de abril, y que tiene a las fuerzas extrajeras como uno de sus principales objetivos.
Hace dos semanas, un soldado y ocho civiles afganos de la misión de la OTAN en Afganistán murieron en un ataque suicida con bombas a una base de tropas internacionales en Kabul, en el que también fallecieron los atacantes.
El Ministerio de Defensa afgano pidió a las fuerzas extranjeras hace unas semanas que enviase refuerzos a las provincias más volátiles del país y las tropas estadounidenses han apoyado desde el aire las operaciones del Ejército afgano en Helmand.
La OTAN puso punto final en 2014 a su misión de combate en Afganistán, la ISAF, sustituida desde enero por la operación "Apoyo Decidido" con unos cuatro mil soldados en tareas de asistencia y capacitación. Estados Unidos mantiene desplegados 9,800 militares hasta final de año como parte de su misión "antiterrorista" en Afganistán.
Investigarán asesinato de civiles
De otra parte, el Pentágono reanudó una investigación sobre las denuncias de complicidad de las fuerzas especiales estadounidenses en el asesinato de civiles afganos en la provincia de Wardak en 2012/2013, indicó este martes, confirmando informaciones publicadas en The New York Times.
"Se identificaron informaciones y pistas que exigen investigaciones suplementarias", declaró Chris Grey, portavoz del servicio de investigación del Ejército estadunidense. La investigación refiere al rol desempeñado por una unidad de las fuerzas especiales estadunidenses, los Boinas Verdes, en la muerte de civiles afganos en el distrito de Nerkh (provincia de Wardak), a finales de 2012 y principios de 2013.
El intérprete de esta unidad, Zikria Kandahari, fue detenido por las autoridades afganas en mayo de 2013 acusado de haber torturado y matado a civiles. Según una investigación en el terreno de la revista estadunidense Rolling Stone, publicada en noviembre de 2013, los Boinas Verdes habrían tolerado e incluso habrían estado implicados en actos de tortura y asesinatos.
Las autoridades afganas estimaron que en total 18 afganos podrían haber muerto en operaciones vinculadas con la unidad ODA 3124 de los Boinas Verdes. El asunto provocó una crisis entre las fuerzas de la coalición internacional (Isaf) y el gobierno afgano del presidente Hamid Karzai. Las fuerzas estadunidenses tuvieron que retirar dicha unidad del distrito de Nerkh.
Tras su marcha en abril, se encontraron restos de diez personas enterrados en las inmediaciones de la base, según fuentes afganas. "Estamos decididos a investigar estas acusaciones hasta que estemos seguros de haber llegado al final de todas las pistas e informaciones pertinentes", señaló Chris Grey.
