Decenas de sirios intentaron hoy cruzar la frontera entre Marruecos y España en la ciudad española de Melilla (norte de África), informaron fuentes policiales. A consecuencia de esta avalancha, el puesto fronterizo de Beni Enzar, el principal de los cuatro que existen entre Melilla y Marruecos, fue cerrado por las policía española, aunque reabierto por la noche.
Las autoridades españolas tuvieron que cerrar la verja ante la llegada "en masa" de un grupo "numeroso" de sirios, que han intentado cruzar a territorio español "a la carrera", informaron a EFE las mencionadas fuentes policiales. Posteriormente, hasta el puesto fronterizo, se han desplazado varias patrullas de la Policía española, que han establecido un despliegue para evitar la entrada irregular y por la fuerza.
Sobre las 22:20 horas, una vez dispersado al grupo personas, se restableció el tránsito fronterizo, primero de peatones, y minutos más tarde de vehículos. Cientos de ciudadanos marroquíes que regresaban a su país tras pasar el día en Melilla se habían visto afectados por el cierre, pero finalmente han podido regresar a su país, al igual que algunos melillenses que retornaban a la ciudad.
De otra parte, la ONU informó hoy que 430 hombres de entre 15 y 55 años habían sido detenidos para ser interrogados cuando salieron de la ciudad vieja de Homs, en el centro de Siria, y que 181 fueron liberados enseguida. Entre estos últimos, 111 fueron liberados el miércoles y 70 hoy. "Pensamos que aún quedan dos mil personas en la ciudad vieja de Homs", precisó el portavoz de Naciones Unidas, Martin Nesirky.
El portavoz aseguró que la ONU "no ha recibido comunicación oficial" a propósito de una eventual prolongación de la tregua, que ha permitido, según él, la evacuación de al menos 1,370 civiles de Homs desde el viernes último. Pero los equipos de la ONU siguen en el lugar y continúan haciendo el seguimiento de los hombres que son detenidos e interrogados por los servicios de seguridad sirios tras su evacuación del reducto rebelde.
"Seguimos preocupados por su suerte", afirmó Nesirky, aunque siguió sin pedir su liberación inmediata como ya hicieron París, Londres y Washington. Desde el inicio del cese el fuego en Homs, la ONU entregó ayuda a 2,500 habitantes de la ciudad, incluyendo víveres para un mes. Según el gobernador de la region de Homs, Talal Barazi, la distribución de ayuda y las evacuaciones de civiles se reanudarán el viernes tras una suspensión de un día. La tregua que entró en vigor el 7 de febrero para permitir esas operaciones se mantendrá hasta el sábado de noche.
Mientras, helicópteros del régimen sirio atacaron áreas en control de los rebeldes en Alepo con bombas barril, causando la muerte de al menos 51 personas, afirmó hoy el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos. El Observatorio dijo que 38 civiles, incluyendo a una familia de siete personas, así como 13 combatientes rebeldes murieron en los ataques del miércoles contra el norte de Alepo.