Alfonso Sosa, director técnico de Necaxa, reconoció que el parón llegó a afectarles a su equipo, sobre todo porque es un conjunto que va conociéndose y que, con tanto tiempo de inactividad a un nivel de alto rendimiento, fue complicado su regreso a la Liga MX.
“Cuatro meses sin jugar un partido oficial es muchísimo tiempo y de alguna manera lo resintieron los jugadores, pero para esto sirven estos partidos y lo iremos ajustando”, reconoció el director técnico al término de la derrota 0-3 ante Tigres.
Poncho admite que la actual pandemia de coronavirus, la cual ha provocado que casi un centenar de jugadores hayan dado positivo, obliga a que la forma de trabajo sea distinta, pues se deben tomar preparaciones. Incluso los partidos de pretemporada fueron distintos, al tener todos los técnicos y suplentes que usar cubrebocas y, por supuesto, jugar sin público.
“Es complicado todo lo que estamos viviendo, eso provoca que trabajes de una forma diferente. Circunstancias imprevistas hace que vayas preparando distinto. La pretemporada fue atípica también”.
Sosa señala que parte de la derrota se debe a que han tenido poco tiempo para que el equipo pudiera trabajar junto, por lo que la falta de química era evidente, contrario a Tigres, que ha mantenido una base desde hace años, lo cual terminó en tan abultado revés.
“Enfrente tenemos a un rival que tiene 3,4 años que ha jugado juntos, que te trae de un lado a otro, lo pagamos, pero el segundo tiempo fue distinto, el equipo quedó mejor posicionado, creó algunas situaciones de gol y anímicamente nos fue pegando”.
Asimismo, reconoció que “afecta la ausencia de Mauro (Quiroga), pero no es más jugador de Necaxa, tenemos que adaptarnos a lo que tenemos, él ya es historia. Nos faltó Lucas (Passerini), Claudio (Baeza), (Juan) Delgado, yo creo que con esas incorporaciones podremos lograr más”.