Restos óseos que podrían tener más de mil años fueron descubiertos por los vientos de Ofelia en su paso por Irlanda.
El hallazgo ocurrió en el condado de Wexford en Kilmore Quay cuando una persona pasó por el lugar y los vio el martes pasado, un día después de que la tormenta dejó a tres personas muertas.
El fotógrafo Jim Campbell llegó al lugar y pensó que se trataba de una persona que había perecido por el huracán, pero después un arqueólogo lo evaluó y determinó que su origen era más antiguo.
Se cree que el lugar donde fueron descubiertos pudo haber sido un sitio funerario antiguo, que no había sido hallado hasta ahora cuando los vientos de Ofelia erosionaron el suelo.
Los restos fueron llevados a Dublín para realizarle pruebas arqueológicas y determinar su edad exacta y el Museo Nacional de Irlanda en Dublín se encargará de su resguardo, de acuerdo con el medio local IFL Science.
EB