Realizar este tour fue un sueño hecho realidad, ya había escuchado de pintorescos destinos que se encuentran muy cerca y también dentro de San Antonio. Y al conocerlos quedé gratamente impresionada, pues encontré más de lo que esperaba. Lo ideal es hospedarte en esta gran ciudad de Texas para iniciar muy temprano los trayectos, no hay que esperar mucho para encontrarse de frente a la aventura pues los atractivos se encuentran a máximo una hora de distancia en automóvil.
Pequeños tesoros alemanes
Empieza tu recorrido por dos ciudades que fueron pobladas hace 150 años por inmigrantes alemanes y que se ubican en el Texas Hill Country. La primera es Boerne: es necesario manejar hacia el norte por 37 minutos para llegar a este pequeño poblado entre colinas y a los pies del arroyo Cibolo Creek; cuenta con un sistema de senderos que serpentean a través de la ciudad para disfrutarla plenamente.
Caminar a lo largo de su calle principal Hill Country Mile y alrededor del parque de Main Plaza, te permite observar sus 140 estructuras históricas y tiendas repletas de antigüedades, tapetes tejidos a mano, joyas, libros, artesanías y accesorios para el hogar.
Los aromas que emanan de Bear Moon Bakery seducen, se trata de un pequeño restaurante muy singular porque en él hornean sus panes, galletas y panqués. Además sirven comidas y desayunos con un delicioso toque casero. No pude resistir la tentación de comer una rebanada de un típico pay de durazno. Tampoco hay que dejar escapar la oportunidad de probar la cerveza de la zona, junto al río.
Muy cerca hay cascadas y cuevas, pero el parque Cibolo Nature Center & Farm, resulta una parada obligada cuando hay niños en la familia, tiene como objetivo conectar a las personas con la naturaleza gracias a sus cuatro ecosistemas. Una de sus sendas lleva hacia un río bordeado por altos cipreses donde los chiquitines podrán pescar; otro camino muestra la huella de un acrocantosaurio, un reptil que vivió en la zona en el período Cretácico.
Los pequeños se divertirán en otra vereda al observar aves, atrapar mariposas o simplemente disfrutar de la pradera. Los sábados hay un mercado de granjeros que genera un ambiente de fiesta; abre toda la semana y no tiene costo de entrada. El 17 de septiembre ofrecerá un concierto al aire libre, consulta más detalles en www.cibolo.org
Tradición alemana
El recorrido debe continuar hacia Fredericksburg, el tiempo estimado de arribo es de 40 minutos conduciendo desde Boerne; su arquitectura transporta a Alemania en un abrir y cerrar de ojos. Es conocida por su granja de flores silvestres en Wildseed Farms, y por ser la sede de 350 festivales al año, como el Oktoberfest, una celebración germana de tres días que muestra comida, vinos y música típica del país europeo.
¿Quieres conocer el proceso de fabricación del vino? En el área se ubican 30 bodegas, pero si eliges Grape Creek Vineyards haz una reservación para recorrer sus viñedos y obtener una cata de vino. Si deseas algo más especializado la opción es 4.0 Cellars, donde un experto te enseñará las cualidades de cada tipo de vino y cómo combinarlos con los quesos adecuados.
Conoce un poco de historia en el Museo Nacional de Guerra del Pacífico, dedicado a los héroes militares que sirvieron en la Segunda Guerra Mundial; incluso tiene un relajante Jardín Japonés de la Paz, cortesía de Japón.
Si te agradan las aventuras visita el Parque de la Roca Encantada, que posee un domo de granito rosa con una altura de 147 metros, el segundo más grande de Estados Unidos, ideal para escalar y acampar.
En la histórica Main Street te toparás con galerías de arte, tiendas de decoración, de dulces, de ropa y restaurantes, entre los que destaca Fredericksburg Brewing Company donde convergen pasado y presente, preparan comida alemana y producen cerveza artesanal; brinda catas que explican el proceso de elaboración y algunas de las mezclas que elaboran, como la que contiene cacao. Realiza tus recorridos en bicicleta, solo tienes que rentar todos los elementos en Jack and Adam's Bicycles, que incluso ofrece tours.
La perla de San Antonio
Sorpréndete con Pearl Brewery, un nuevo barrio hipster ubicado en el norte del San Antonio River Walk, que poco a poco va cobrando auge por todas las riquezas que lo conforman.
La idea inicial del proyecto era crear una zona gourmet, porque la comida ayuda a contar historias, gracias a la colaboración que existe entre agricultores, rancheros, cocineros y comensales, pero después se convirtió en algo más y actualmente tiene 300 departamentos en renta, así como 17 restaurantes y cafés, pero en busca de hacer comunidad, los chefs que laboran en ellos deben ser egresados de The Culinary Institute of America, ubicado en la misma área.
Su ícono es el edificio de una fábrica cervecera fundada en 1881, en el que actualmente se impone majestuoso el Hotel Emma con 146 habitaciones, llamado así en honor de Emma Koehler, esposa del fundador de la cervecería, Otto Koehler. Ella fue responsable de mantenerla a flote durante la prohibición de la cerveza en 1919. Su bar Sternewirth tiene un techo abovedado y algunas de sus mesas se encuentran dentro de contenedores de cerveza.
La comida que sirven en Supper es fabulosa y creada con ingredientes de temporada. Visita Larder, una pequeña tienda gourmet que vende pan, cerveza, carnes frías y hasta comida para llevar. Echa un vistazo a su biblioteca que tiene 3700 libros de todo tipo, solo si eres huésped puedes acceder a ella.
Las 14 boutiques independientes también son dignas de recorrerse una por una, encontrarás zapaterías, tiendas de cocina, de prendas de artistas locales y decoración.
Dos veces a la semana se establece un mercado con productos de granjeros locales. Es posible llegar en auto, pero es más divertido si lo haces en un taxi de río. Abórdalo desde el San Antonio River Walk en el centro, por el camino puedes hacer una parada para conocer el San Antonio Museum of Art con una colección de 25,000 obras latinoamericanas, asiáticas y folclóricas, además de las que llegan a través de exposiciones temporales.
Divertidas opciones
El más grande de todos los SeaWorld que hay en Estados Unidos se ubica en San Antonio y es el hogar de 21 delfines nariz de botella.
Al visitarlo apreciarás cuatro shows: uno de ballenas belugas, otro de delfines, uno más con leones marinos y el espectacular de Shamu con orcas. Disfruta de atracciones como el Rio Loco y las montañas rusas The Great White y Steel Eel.
No dejes de pasar por el recién inaugurado Discovery Point, que posee el Explorer's Reef, hogar de 350 especies de peces y cinco tipos de tiburones en peligro de extinción. Visítalo como parte de tu boleto de admisión a SeaWorld. Es el único lugar en Texas donde es posible nadar con delfines, leones marinos y ballenas belugas, lo cual tiene un costo adicional de 125 a 150 dólares por persona.
Si quieres una aventura más refrescante dirígete al Aquatica SeaWorld's Waterpark, disfrutarás emociones extremas en sus toboganes Kiwi Curl, Woohoo Falls, el Walhalla Wave (que hace surcar olas a gravedad cero) o el Stingray Falls, que después de dar giros desemboca en una gruta submarina que permite apreciar peces tropicales.
Lleva espacio en tu maleta
Este destino es considerado como uno de los paraísos para hacer compras y lo constatarás en el mall The Shops at La Cantera; el sitio es muy relajante pues caminas al aire libre rodeado de plantas naturales y cascadas. Cuenta con las tiendas departamentales Nordstrom, Macy´s, Neiman Marcus, Dillard´s y más de 160 tiendas de especialidades, además de un anexo llamado Main Street con pequeñas avenidas bordeadas de boutiques.
También alberga restaurantes, cafeterías, establecimientos de snacks y casas de té, ideales para tomar un descanso. Come o cena en Whiskey Cake Kitchen & Bar, que sirve unos suculentos tomates fritos, sándwiches, hamburguesas y ensaladas.
Recupera tus impuestos en las oficinas de Texas Tax Back; debes presentar visa, pasaporte, boleto de avión y tus recibos de compras. Más información en www.txtaxback.com
Hospedaje fuera de serie
Vive la experiencia del Hotel JW Marriott San Antonio Hill Country Resort & Spa, chicos y grandes lo amarán. Cimentado entre colinas, arroyos y caminos de robles, posee el River Bluff Water Experience con dos toboganes de 14 metros de alto, un largo río rápido, alberca de playa con arena incluida, albercas calientes y frías, además de cabañas privadas con entrada particular, piscina, bebidas y paquete de pícnic.
Solo miembros y huéspedes tienen acceso al campo de golf, considerado uno de los mejores de América. Si lo tuyo es la relajación entonces lo ideal es sacar una cita dentro del Lantana Resort Spa para recibir un tratamiento corporal con lavanda; para cuidar la figura posee un centro de fitness, ofrece clases de yoga, refrigerios saludables en su Replenish Spa Bistro y una tranquila piscina.
Los sábados es posible realizar un tour por sus hortalizas y jardines florales. Los niños de 4 a 12 años se divertirán dentro del Range Riders Kid's Club con juegos y actividades emocionantes. Su restaurante Cibolo, además de ofrecer especialidades tex-mex, fue galardonado con el Distintivo T, otorgado por el Consejo Regulador del Tequila, A. C., por su bar que posee 100 marcas diferentes de esta bebida y diversos cocteles; puedes solicitar una cata privada.
El hotel, el más grande de esta cadena con 1002 habitaciones, está a solo unos minutos del aeropuerto de San Antonio.
TAGS RELACIONADOS:
