Marina Gutiérrez, dueña de "La Ofrenda", concept store y café, anunció otra iniciativa para ayudar a los que menos tienen en esta época de frío, se trata de aplicar en la región la dinámica "café pendiente", que consiste en pagar un café para que algún indigente o persona necesitada lo consuma en esta época de frío.
Es una práctica filantrópica que tuvo sus orígenes en Nápoles, Italia, en el año 2008. La idea supone una cadena de consumiciones de café. El consumidor paga el suyo primero y deja pagado uno o varios más en carácter de "pendientes" para quienes no puedan pagarlo.
Cuando las personas sin recursos económicos preguntan si hay algún café pendiente, si es el caso se le invita un café que pagó previamente otro consumidor. Gracias a la inmensa difusión de estas prácticas mediante las redes sociales se ha llegado a difundir en varios lugares del mundo.
En septiembre de 2013 y después que se difundiera el cuento de Tonino Guerra en las redes sociales, Fabiola Kun puso manos a la obra y comenzó a impulsar la iniciativa de una forma más formal y estructurada, montando el sitio www.cafependiente.org.mx, de acuerdo a la filosofía que maneja la asociación Distrito Colón de ayudar a la sociedad, el café La Ofrenda decidió sumarse a esta iniciativa.[OBJECT]
"La idea de aplicar el café pendiente nace de ver la necesidad de mucha gente que pasa por la tienda, el perchero ambulante nos hizo darnos cuenta de la gran necesidad de ayudar a los que menos tienen y padecen frío en la temporada invernal".
"Mucha gente pasa y nos pide algo de comer o una bebida caliente, sin embargo no podemos costear todo lo que regalamos, por esa razón decidimos sumarnos a esta iniciativa altruista".
Marina Gutiérrez advierte que la iniciativa nacional es coordinada por mexicanos que radican en la Ciudad de México, los negocios que pretendan unirse a esta iniciativa deben contactarse con estos coordinadores vía redes sociales, para analizar la misión y visión de la misma.
Los negocios que pretendan sumarse a esta iniciativa tendrán que alinearse al reglamento que la misma organización marca, así como a las auditorías, cuyo único fin es elevar la confianza ciudadana en iniciativas a favor de la sociedad.
"El café pendiente se queda en resguardo de la cafetería o del restaurante, el negocio que está adherido a esta iniciativa coloca en algún lugar visible cuántos cafés pendientes hay disponibles para la gente que menos tiene. Las personas pueden llevarse una bebida caliente que no tienen que pagar, puesto que otra persona ya lo hizo".
Así como se hizo viral y se replicó la idea que "tropicalizaron" en la región, como lo fue el perchero ambulante, esperan que más comercios se sumen a esta iniciativa de ayuda al más necesitado en esta época de frío.
"Es un ganar ganar, gana la sociedad, gana el comercio al ser visitado por personas altruistas y de buen corazón. Destacó que todo el dinero que se paga por un café en La Ofrenda se queda en México, ya que el café que usan es de Chiapas".
"Al comprar café en este lugar se está ayudando directamente a varias comunidades indígenas que viven del cultivo orgánico del café, apoyan a varias familias que dependen de esta cafetería y por último ayudan a los más necesitados", concluyó Marina Gutiérrez.