Luego de que el Papa Francisco declarara que "México tiene su pedacito de guerra", el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles señaló que su santidad arribará al estado para dejar un mensaje que permita a los michoacanos encontrar la ruta a la paz, el entendimiento y la reconciliación.
"Nos va a ayudar a bajarle a los pleitos, a reflexionar, al respeto por nuestros hijos, parejas y familia", dijo el mandatario en la región de la Tierra Caliente de Huetamo, zona limítrofe con Guerrero.
Asimismo, el mandatario aceptó que la visita del Papa Francisco será un motivo de reconciliación en una entidad severamente golpeada por la violencia en años anteriores y que dejó como resultado la confrontación y el encono.
El titular del Ejecutivo señaló que más allá de las críticas, la gira papal posicionará a Michoacán en el contexto nacional e internacional, en el que la entidad se ha manejado de manera negativa ante la presencia de grupos delictivos y la debilidad institucional.
El máximo líder de la Iglesia Católica habría declarado que viene a México con el pleno conocimiento de que el país "tiene su "pedacito de guerra".
Hace dos meses, el titular del Ejecutivo ofreció en Apatzingán, cuna del cártel de la Caballeros Templarios una ampliación de la gira papal, como una propuesta para reconciliar esa zona, antes en conflicto y escenario de violencia, donde los huérfanos y viudas de la violencia cuentan por miles.
Los esfuerzos no prosperaron, pero el perredista confió en que el mensaje se traduzca en una expectativa de reencuentro, perdón y reconciliación entre los Michoacanos.