El gobernador Héctor Astudillo Flores llamó a no retroceder ante los embates del crimen organizado, los que admitió, han golpeado a la sociedad y las propias instituciones del poder público.
El jefe del Ejecutivo local, lamentó el asesinato de Luis Andrés Lara García, director de recursos humanos de Acapulco y su chofer, ocurrido la mañana del lunes 7 de diciembre.
En Palacio de Gobierno, Astudillo Flores sostuvo que lo sucedido en Acapulco refleja la circunstancia por la que atraviesa Guerrero en materia de inseguridad.
Consideró necesario pedir a la federación que ayude al estado un poco más de lo que ya le ha dado el respaldo, dado que la circunstancia de violencia no para.
Manifestó que ya se comunicó con el alcalde porteño, Jesús Evodio Velázquez Aguirre para manifestarle su solidaridad y dirigir las condolencias para la familia del funcionario abatido y su chofer.
Admitió que el tema sería ineludible en la sesión del Grupo de Coordinación Guerrero que se desarrollaría durante la misma jornada de lunes.
Ante los golpes asestados contra la población y los entes del sector público el gobernador anotó: "Creo que hay que organizarnos más, no hay que dar un milímetro de paso para atrás; hay que mantenerse muy firme en enfrentar todas estas circunstancias, porque está muy claro que hay una decisión absoluta de la delincuencia organizada de atentar contra los ciudadanos pero también contra las instituciones".
Por la mañana, durante el evento de izamiento de la bandera nacional, en la explanada del Palacio, Astudillo Flores habló sobre el relanzamiento del operativo Tierra Caliente, que involucra personal del Ejército Mexicano, la Policía Federal (PF) y del estado.
Anticipó que habrá una evaluación constante respecto a los avances del operativo Tierra Caliente, porque no se trata solamente de desplegar a policías y militares sin que se tenga el seguimiento correspondiente.