El secretario de Salud federal, José Narro, afirmó que ante las medidas impuestas por el presidente Donald Trump, en México se cuenta con la capacidad hospitalaria, médica instalada y operativa para recibir y atender, sin sufrir de algún colapso, a los migrantes que sean deportados de los Estados Unidos de Norteamérica.
De gira por Oaxaca aseguró que el sector salud está trabajando en conjunto con diversas instancias del gobierno federal, entre ellas las secretarías de Relaciones Exteriores (SRE), de Gobernación (Segob), de Educación (SEP) y de Desarroollo Social (Sedesol) para activar un plan de acciones que responda a "todos los hermanos que deciden regresar o son deportados a México".
Incluso, dijo se realizan labores desde los consulados para ofrecerles ayuda médica, aunque de cada 10 migrantes que vuelven, siete de ellos cuentan ya con Seguro Popular.
Dejando ver que los que no lo tienen, podrán ser incorporados a algún sistema de salud.
Resaltó que en los 50 consulados que tiene México en el país vecino existe un programa de Ventanillas de Salud, en donde más de cuatro millones de mexicanos han sido atendidos en los últimos meses.
Narro Robles recordó que un compromiso que asumió es el de apoyar a todos los paisanos que tienen quebrantos emocionales por ser deportados.
"Tenemos que responder, si algo tiene la sociedad mexicana es esa actitud solidaria, tenemos que trabajar por la comunidad, aportar esfuerzo personal por la colectividad, asegurar que tendrán respuesta del gobierno y de la sociedad".
MMR
