La lagunera Angélica Grado y su esposo de origen Israelí, Moti Herman Grebois, se quedaron sin empleo debido a la cuarentena por coronavirus, por lo que decidieron vender comida oriental para poder cubrir los gastos del hogar.
El matrimonio elabora pitas artesanales, queso de yogurt y aderezo de menta totalmente caseros que se han ido recomendando entre sus conocidos favoreciendo los pedidos, que aún son por lo que invitan a los laguneros a disfrutar de los sabores del Medio Oriente.
Angélica aprendió a elaborar los platillos de Tierra Santa con la orientación de la familia de su esposo a través de videollamadas, arte culinario que ahora domina y que ahora les permite obtener algo de recursos para el hogar.
Si usted desea apoyar a la familia Hernán Grado y disfrutar de estos deliciosos platillos puede hacer los pedidos vía WhatsApp al teléfono 871 231 7791.
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