Hugo Montoya Díaz, ex director de Innovación y Competitividad de la Agencia Espacial Mexicana (AEM), señaló que más que espionaje, los software que utilizan los Estados desarrollados a nivel mundial, son de vigilancia de la entrada y salida de los datos hacia las bases, servidores o a los lugares centrales con la finalidad de tener el control interno y aunque son tecnologías que llevan a conocer información diversa, su fin es diferente al espionaje.
Este es el caso de México a través de sus grupos de inteligencia, utiliza softwares para vigilar principalmente en los casos delictivos que así lo ameriten, como lo hacen agencias de seguridad a nivel mundial.[OBJECT]
"La diferencia entre espionaje e inteligencia, es que la inteligencia analiza el comportamiento con diversas herramientas, porque nosotros como seres humanos tenemos comportamientos típicos y atípicos".
"Por ejemplo si sé que alguien va siempre al mismo cajero, inclusive sin sacar el celular, es trazado para poder ver que va a sacar dinero", enfatizó.
De igual forma, en caso de que un juez autorice una intervención de un celular eso ya no es espionaje, es vigilancia.
Desde que se empezaron a desarrollar los sistemas, primero iniciaron con la creación de tecnologías de contención, que servían para proteger los datos de los Estados y con ello la permanencia de la soberanía.
Entonces empezó a evolucionar y actualmente los gobiernos operan con softwares analíticos, o conocidos también como cómputo científico.
Un ejemplo de estos programas, son las cámaras de vigilancia, que proporcionan un video analítico sobre un determinado suceso, como un robo.
"Y te puede decir si hubo un robo, por ejemplo te puede decir por medio de un software cuantas cámaras o en cuántos lugares ha recorrido la camioneta, entonces las agencias internacionales de seguridad nacional usan la analítica y le llaman vigilancia, más que espionaje", externó.
Recordó que el espionaje es un delito y aunque existen agencias internacionales como la CIA o el FBI, que se les señala de espías, resaltó que su nombre oficial son agentes, no espías, "este se supone que es el malo y delinque y está jugando a dos bandos".
Lejos de dedicarse a espiar, para el también vicepresidente de ciberseguridad en la CANIETI Delegación Laguna Durango-Coahuila en México, lo que hace falta en todo caso, es protección.
Esto no significa que en informática sea inseguro, sino que los softwares que se han desarrollado tienen fallas "y jamás se hubiera pensado que esas fallas pudieran generar una vulnerabilidad".
"Cuando empieza a crecer la tecnología, empiezan a llegar a diferentes manos y como comentaba el presidente, cada vez está abarcando más segmentos, sectores y más acciones en tu día a día", enfatizó.
Hugo Montoya tiene una empresa que se enfoca precisamente en proporcionar servicios de ciberseguridad, dijo que ahí tienen un paradigma que constantemente se aborda, "fácil de manejar pero fácil de vulnerar o difícil de manejar pero casi inquebrantable", refiriéndose a los software de seguridad.
Sin embargo aseguró que en el mundo no existe ningún software de ninguna clase completamente perfecto, aunque algunos sean más difíciles de vulnerar que otros.
Actualmente en México apenas se inicia con las legislaciones en torno al tema de ciberseguridad, pero existe algo denominado cómputo forense, que se refiere al análisis de los hechos en un equipo electrónico o una computadora y aunque se podría ver como espionaje, tampoco lo es.
Como ejemplo, señaló que Estados Unidos tiene policías especialistas en cómputo forense, mientras que en la Ciudad de México existe la policía de Ciberseguridad y la Policía Científica del Consejo Nacional de Seguridad, (CNS).
"Por ejemplo ellos hacen un cómputo forense, que se trata de que agarran el equipo de alguien que secuestraron o que mataron y llegan a la escena del crimen para analizarlo", enfatizó.
Aunque la vigilancia entre organismos y el gobierno está bien definida desde la Constitución Política, hasta las reglas de operación del Consejo Nacional de Seguridad y la Secretaría de Gobierno, no hay duda que actualmente existe una ciberguerra que realizan los grupos antisistémicos.
Subversivos de gente que se quiere expresar y son quienes utilizan software para detectar la vulnerabilidad de los sistemas de seguridad de la información y aunque su función original era espiar, actualmente los usan para robarse el Internet.
En ese sentido, la ciberseguridad continúa siendo un talón de aquiles para todos los sectores, debido por una parte a que no existe una cultura de proteger la información y segunda a la poca importancia que la gente brinda al tema, lo cual hace que estén más vulnerables al exponer su información en las diferentes redes sociales.[OBJECT]
Ante esta situación, Montoya Ayala hizo una recomendación generalizada en el sentido de reconocer que ante el desarrollo de más tecnología y el uso cada vez más frecuente de la computadora, es necesario implementar medidas de seguridad adecuadas en todos los niveles como una empresa, un gobierno y personal.
De lo contrario existe el riesgo de caer en problemas muy graves, solamente por la falta de conocimiento sobre estos sistemas.
"Pero no solamente en la relación de un antivirus, sino que la ciberseguridad va en la función del tipo de la empresa que tienes, por ejemplo si tienes una financiera, tienes que estar asegurado y también si es una tiendita que tiene regalos en una computadora", expresó.
Inclusive las redes personales también tienen un riesgo, porque pueden ser motivo de ataques, de suplantación de identidad, modificar fotografías muy íntimas, personales y publicarlas a medios masivos.