A través de diferentes estrategias que se aplicarán una vez que empiecen a operar las instalaciones de la primera Clínica de Prevención del Cáncer en México, la cual tendrá su sede en el Centro Universitario contra el Cáncer, en el Hospital de Universitario, el Instituto Nacional de Cancerología (Incan) impulsará la investigación preventiva del cáncer en Monterrey.
De acuerdo con el director de Investigación del Incan, Luis Alonso Herrera Montalvo, entre el 10 y el 15 por ciento de los pacientes con este padecimiento poseen características genéticas que indican claramente que sus familiares en primer o segundo grado poseyeron algún tipo de tumoración, hecho que señala a sus descendientes como un selecto grupo de población que podría con mayores probabilidades desarrollar algún tipo de cáncer.
El investigador del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la UNAM agregó que dependiendo las características de las mutaciones genéticas en el paciente con cáncer éstas darán pie a una serie de estudios a los genes del círculo familiar, mediante un análisis de sangre, lo anterior para descartar la presencia de las mismas alteraciones en aquellos que son cercanos al paciente.
En caso de que el resultado sea positivo, los especialistas plantearán por conducto de un consejo genético a los potenciales pacientes de cáncer, las posibilidades que tienen para evitar que se desarrolle algún tipo de tumoración y será en coordinación con ellos que se decidirán las acciones preventivas.