Tres de los ocho ediles detenidos durante el último año en Michoacán fueron exonerados de los cargos por delitos contra la salud, pero permanecerán presos toda vez que enfrentan proceso penal acusados de delincuencia organizada y extorsión.
Dentro de la estrategia federal de combate a la delincuencia organizada, los alcaldes Arquímedes Oseguera de Lázaro Cárdenas, Dalia Santana de Huetamo y Salma Karrum de Pátzcuaro fueron detenidos por sus presuntos vínculos con los Caballeros Templarios, grupo delictivo encabezado por Servando Gómez Martínez, La Tuta.
La captura de los funcionarios fue precedida por la difusión de videos y fotografías donde se advierten reuniones de los ex munícipes con La Tuta, lo que originó el inicio de las averiguaciones judiciales de donde se desprendieron presuntos actos de extorsión por parte de los ahora detenidos.
En un inicio, el Ministerio Público Federal los señaló como probables responsables de narcotráfico en la modalidad de de colaboración al fomento de la comisión o ejecución de delitos contra la salud, pero fue desechado por un juez federal.
Los munícipes continúan detenidos en el penal David Franco Rodríguez en la ciudad de Morelia, en donde habrán de permanecer en tanto se desarrollan los diferentes juicios en su contra en materia federal por los delitos arriba mencionados.
El particular caso del edil de Lázaro Cárdenas, Arquímedes Oseguera, enfrenta una causa penal adicional del orden común por su presunta autoría intelectual del asesinato de un abogado.