Elementos de la Procuraduría de Justicia de Michoacán y de la Secretaría de Seguridad Pública detuvieron al alcalde de Jungapeo, Jaime Hernández Rivera, a uno de sus funcionarios y a cuatro policías del ayuntamiento.
El edil, el subdirector de Seguridad Pública municipal y los uniformados fueron llevados ante la representación social acusados de ser autores materiales e intelectuales del secuestro de una mujer y su padre, cuyos cuerpos fueron localizados en una fosa clandestina en un panteón del municipio.
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Según la carpeta de investigación, el pasado 18 de junio Adelaida ‘O’, y su padre Wenceslao ‘O’, fueron sustraídos de su domicilio particular en la zona centro de Jungapeo, por lo que se levantó una denuncia por familiares en la que se señalaba que en el hecho delictivo participaron policías municipales y el edil.
El gobernador del estado, Silvano Aureoles Conejo, enfatizó que no tolerara que funcionarios se coludan con la delincuencia.
En rueda de prensa, el mandatario estatal señaló que el origen partidista del alcalde (perredista), no impidió ni entorpeció su detención.
“Yo no voy a tolerar que presidentes municipales, o funcionarios, se coludan o protejan a los delincuentes. Porque nunca hubiéramos llegado a estos niveles de criminalidad si no se hubiera contado con la complacencia de los gobiernos municipales y de otros órdenes”, dijo.
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