La Procuraduría General de la República a través de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales realiza un despliegue ministerial para vigilar la elección extraordinaria de este domingo en Tixtla, Guerrero.
De acuerdo con la dependencia, con esta acción se busca dar garantías a los habitantes para que este 29 de noviembre "salgan con confianza a ejercer su derecho a votar por la opción política de su agrado".
La Fepade aseguro que estará al pendiente de las posibles denuncias que se puedan presentar antes, durante y después de la jornada electoral en la que se elegirá al presidente municipal.
Las violaciones al ordenamiento electoral que se pueden presentar el día de la jornada son: recoger en cualquier tiempo, sin causa prevista por la ley, una o más credenciales para votar de los ciudadanos y apoderarse, destruir, alterar, vender o suministrar de manera ilegal, en cualquier tiempo, materiales o documentos públicos electorales.
Asimismo, obstaculizar o interferir el desarrollo normal de las votaciones, el escrutinio y cómputo, o el adecuado ejercicio de las tareas de los funcionarios electorales.
Además el obtener o solicitar declaración firmada del elector acerca de su intención o el sentido de su voto y realizar por cualquier medio algún acto que provoque temor o intimidación en el electorado que atente contra la libertad del sufragio, o perturbe el orden o el libre acceso de los electores a la casilla.
La Fepade se declaró lista y con los servicios suficientes para recibir las denuncias de los ciudadanos que detecten alguna irregularidad.
En julio, el Tribunal Electoral de Guerrero anuló la elección de autoridades municipales en Tixtla debido a que no se instalaron el 44 por ciento de las casillas.
