Usuarios del servicio de transporte público en Toluca, Lerma, Metepec, San Mateo Atenco y Zinacantepec coincidieron en que no hace falta que haya autorización oficial al aumento en el costo del pasaje pues actualmente ya cuesta 10 pesos el tramo mínimo, cuando se trata de transportación foránea, hubo al menos dos alzas aprobadas desde enero y febrero del presenta año.
"El servicio es costoso, de riesgo y no hay una autoridad que responda a las denuncias. Hay varios anuncios sobre el chat de WhatsApp que supuestamente recibe las quejas, pero piden fotografía de la unidad o del chofer, las placas, y a veces hasta solicitan video que hay quienes no saben capturar e incluso que no es posible tomar", dijo José Fausto, de 70 años.
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A pesar de la información difundida por la Secretaría de Movilidad respecto del costo por el servicio, negando el aumento a 10.50 pesos, los ciudadanos que emplean el servicio negaron que haya candados que aseguren el pago por 8 pesos como señala la tarifa.
"No sólo es peligroso intentar tomar una fotografía del conductor con sus acompañantes, sino que a veces hasta retan a las mujeres que viajan solas o con hijos pequeños. No hay límites y a pesar de los anuncios en la televisión sobre los operativos o que no nos dejemos engañar, no hay quien sancione a los choferes que además muchas veces andan borrachos o simplemente conducen sin ninguna seguridad", criticó Jesús Ramírez.
Sobre las denuncias a través de medios electrónicos como celulares o aplicaciones por medio de internet, coincidieron en que no hay respuesta, excepto a casos como el video donde fue asaltado un camión mientras circulaba por la capital mexiquense, "pero la inseguridad a bordo de las unidades es permanente, nadie nos ayuda con eso".
RAM
