Unas 70 familias corren el riesgo de perder su patrimonio. Compraron una casa a una constructora que ya desapareció y nadie les informó que estaban construidas sobre ductos de Pemex.
Hoy los vecinos del fraccionamiento Punta del Sol, en Las Joyas, se enfrentan a dos problemas: uno, las casas presentan problemas graves de cuarteaduras y hundimientos, y dos a la inseguridad, ya que los colonos aseguran que constantemente el olor a combustible es fuerte porque hombres acuden a ordeñarlos.
Luego de la explosión que se registró el jueves 21 de septiembre en el Tajo de Santa Ana, los vecinos temen un accidente similar; al recordar el derrame que se registró en Punta del Sol en el 2016 a consecuencia de la ordeña de hidrocarburo en los ductos, lo que provocó la movilización del Ejercito Mexicano, Seguridad Física de Pemex, Policía Municipal, Bomberos y personal de Protección Civil, lo cual consta en un documento emitido por el Cuerpo de Bomberos de León.
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“Fueron dos días, desde el sábado en la mañana nos levantamos con olor a gasolina pero fuerte y llamamos al 066 en aquel entonces", recordó Martín Martínez, uno de los afectados.
Derivado de lo anterior, la inseguridad se fue acentuando en la zona, donde el paso de los ductos se convirtió en una oportunidad para aquellos que se dedican al robo de hidrocarburo, quienes se asentaron en la colonia.
“Ya ha habido detenidos, vivían unos que tenían juegos se involucraron en eso, los agarró la federal, porque venían mucho para acá los soldados (antes del derrame); para arriba han agarrado más, han agarrado personas entre las casas con aparatos y tambos de gasolina; Ha habido muchísimos detenidos aquí”.
