Con el objetivo de concientizar a la gente sobre la importancia de las enfermedades renales, la Sociedad Internacional de Nefrología y la Federación Internacional de Funciones Renales celebró ayer el Día Mundial del Riñón.
“Es importante enfatizar que a nivel mundial las enfermedades renales suelen pasarse por alto. Además, el diagnóstico a menudo se produce en una fase tardía, principalmente porque la degradación de la función renal es progresiva y silenciosa”, mencionó la nutrióloga de la Secretaría de Salud, Sigrid Pimentel Martín.
Por otra parte, la especialista señaló que adoptar un estilo de vida sano es la forma más eficaz de evitar que se padezca una enfermedad renal a largo plazo.
Recomendaciones para tener riñones sanos y reducir el riesgo de padecer enfermedades renales:
No agregar sal a tus comidas y evitar los alimentos ricos en sodio como embutidos, comidas enlatadas y sopas instantáneas ya que aumentan la presión arterial.
Evitar aceites y grasas, en lugar de freír los alimentos, elegir otras formas de cocción: hervido, a la plancha, al horno.
Consumir proteínas con moderación o dependiendo lo que un nutriólogo recomiende para no sobrecargar los riñones.
Tomar dos litros de agua diariamente para mantener los riñones sanos, especialmente si se tiene litiasis (cálculos renales) o infecciones urinarias recurrentes.
Otras son: mantenerse en forma y activo; controlar regularmente niveles de azúcar en sangre; vigilar presión sanguínea; no fumar; no tomar medicamentos sin receta médica regularmente o no auto recetarse; comprobar función renal con un especialista.
“Consumir líquido ayuda a los riñones a eliminar sodio, urea y toxinas, lo que implica un menor riesgo significativo de desarrollar enfermedades renales crónicas. La ingesta de líquidos recomendada para personas con función renal normal es de 30 mililitros por kilogramo de peso”, concluyó Pimentel Martín.
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