Luego de que diversas dependencias y comisiones en el Cabildo señalaron la importancia de modificar la normativa de Movilidad Urbana que fue aprobada hace un año, el alcalde Miguel Riquelme afirmó que no se precipitaron en lanzarlo.
Aunque reconoció que existen carencias en infraestructura para su implementación como tal.
El pendiente que tienen está enfocado a la modificación de la señalética e infraestructura urbana que permita darle su lugar a diversos grupos de la sociedad, como a los ciclistas, peatones y personas con discapacidad.
"Estamos trabajando en dos frentes: el reactivo que consiste en trabajar en los puntos donde ocurren accidentes y otro de prevención que proyecta cambiar y mejorar la señalética para dar accesibilidad a esos grupos con una inversión de recursos", expuso.[OBJECT]
Cabe destacar que recientemente el Ayuntamiento recibió una recomendación de parte de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CDHEC), debido a que un ciudadano con discapacidad presentó una queja vinculada al mal estado en que están las rampas de acceso en la ciudad.
Ante el cuestionamiento sobre el destino de los recursos de las multas para programas educativos, el edil afirmó que lo han hecho pero no precisó el monto.
"Todavía vemos carencias y fallas, pero para complementarlo tienes que hacerle muchas modificaciones a través de la propia educación vial que ya la tenemos", expuso.
Entre las modificaciones que el reglamento necesita, según algunas dependencias y los regidores, está acondicionarlo para crear multas especiales para los choferes del transporte público y permitir que accidentes de tránsito leves no tengan que ir directamente al Tribunal de Justicia.
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