El Gobierno de Ciudad de México, en conjunto con la ONU, la Secretaría de Energía y el Instituto Nacional de Ecología, presentarán en septiembre próximo el plan de electromovilidad 2017-2024, que tiene como objetivo reducir a la mitad las emisiones contaminantes del transporte público y aumentar los viajes en vehículos eléctricos.
La subsecretaria de Movilidad del gobierno local, Laura Ballesteros, detalló que de los 23 millones de viajes que se realizan a diario en la capital, únicamente 1.5 por ciento se hacen a bordo de algún transporte eléctrico; con esta estrategia se prevé que ese porcentaje aumente a 10 puntos.
“Por eso el plan de electromovilidad es tan importante; hay un reto presupuestal, requerimos dinero de la ciudad, de la Federación, pero hay mucho más en fondos internacionales que no estamos aplicando por falta de planeación. Es lo que estamos trabajando como área encargada y la ONU es aliada para el diseño del plan y el camino para el financiamiento”, dijo Ballesteros al participar en el foro Smart Cities 2017, organizado por la Federación Internacional de Automovilismo.
Este programa, que llevarán a cabo expertos de Naciones Unidas, contempla la creación de corredores eléctricos, crecimiento de las líneas del Metro, tomando en cuenta el plan maestro ya existente, planeación fiscal para tener acceso a recursos internacionales, más taxis eléctricos e involucrar a los ciudadanos.
A la par, se implementará una estrategia de movilidad digital que será gestionada a través de aplicaciones y nuevas tecnologías.
La reducción de las emisiones contaminantes es prioridad para la administración actual, pues en 2015 se registraron mil 823 muertes por la mala calidad del aire, 4 mil 494 hospitalizaciones y 247 mil visitas médicas.
“Lo que hay que observar es que en los últimos 30 años está la referencia de la mala planeación de movilidad que tenemos y disminuyó la apuesta de servicio de transporte eléctrico; justamente hay que revertir esa tendencia”, abundó Ballesteros.
Los planes de la administración local también contemplan la compra de 150 autobuses eléctricos, 100 trolebuses y la rehabilitación de 200.
La estrategia, en conjunto con la Federación y Naciones Unidas, tiene tres ejes de trabajo: disminución de contaminantes que impacte en la calidad del aire; reducir los ocupantes de las calles con coche particular, es decir, incentivar el auto compartido, y el más importante, incrementar el uso del transporte eléctrico con una estrategia que garantice la fuente de energía.
Ballesteros destacó que uno de los puntos fundamentales es que la ciudad cuente con un plan bien establecido para tener acceso al fondo climático internacional, para financiar el nuevo transporte para la capital.
Aunque todavía no existe un cálculo de los recursos necesarios, la inversión será de miles de millones de pesos.
“El plan va a incluir tiempos a corto, mediano y largo plazos. Nada más un cálculo, una línea del Metro cuesta 24 mil millones de pesos, una del Metrobús, 2 mil millones. El costo de un transporte eléctrico contra uno a diésel es de 4 a 1; obviamente los costos se compensan por el tema de la gasolina”, detalló.
Según las autoridades, el siglo de la gasolina barata ya se terminó, y ahora es necesario apostar por otras energías no solo por temas medioambientales, sino también por la economía de las familias capitalinas.
ESTACIONES DE GAS NATURAL
El Gobierno de Ciudad de México asesorará a particulares para incentivar la instalación de estaciones de gas natural en la capital, a través de una comisión especial que presidirá la Oficialía Mayor.
Según un acuerdo publicado en la Gaceta Oficial, esta comisión acompañará a los particulares interesados en instalar una estación de gas natural para dar servicio a los autos del gobierno local que funcionan con este combustible.
Ayudará además a agilizar la expedición de documentos relacionados con la autorización, dictaminación, licencia, permisos, constancias y certificaciones frente a los órganos de la administración pública local y asesoría con los trámites federales.
“Se prevé la reducción de 20 por ciento de recursos en la asignación de combustible a mil 500 vehículos oficiales, así como la conversión de los mismos de gasolina a gas natural, para reducir significativamente las emisiones contaminantes en la de Ciudad de México”, señala.