Dos bomberos de Chihuahua alcanzaron los cinco mil metros de altura en la cumbre más alta del país y la tercera de Norteamérica: el Pico de Orizaba, un volcán inactivo ubicado en los límites de Puebla y Veracruz.
Manuel Eduardo Estrada y Aarón Hernández, ambos deportistas e instructores de nuevos cadetes en el Instituto Superior de Seguridad Chihuahua (ISSCUU), expresaron su orgullo personal y profesional al completar este reto.
Para lograrlo, se prepararon física y mentalmente durante varios meses, enfrentando un arduo entrenamiento.
El Pico de Orizaba, también conocido como Citlaltépetl, es un volcán activo de gran altitud y la montaña más alta de México, con cinco mil 636 metros sobre el nivel del mar.
Su ubicación estratégica entre Puebla y Veracruz lo convierte en un desafío para montañistas experimentados.
Ambos instructores destacaron que, debido a la geografía montañosa del municipio de Chihuahua, es fundamental que los bomberos cuenten con conocimientos de senderismo.
Estas habilidades son esenciales para realizar rescates de personas extraviadas o lesionadas en zonas montañosas, como ha ocurrido en diversas ocasiones.
Por esta razón, las nuevas generaciones de bomberos recibirán instrucción sobre rutas y métodos adecuados para enfrentar este tipo de situaciones.
“Nuestro objetivo principal con este reto es motivar a las nuevas generaciones de bomberos. Que, si se quiere y se es dedicado y disciplinado, se pueden lograr grandes cosas y metas en diferentes rubros de la vida: en el deporte, el trabajo, las finanzas o la familia. Además, les enseñaremos a atender emergencias en colinas y cerros”, explicaron los bomberos.
MO
