Ambientalistas veracruzanos repudiaron la anuencia que otorgó el Congreso del Estado a Pronatura y el Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza (FMCN), para adjudicarse el cuidado de 35 hectáreas del Bosque de Niebla en Xalapa.
Los integrantes de La Asamblea Veracruzana de Iniciativas y Defensa Ambiental (LAVIDA), exigieron al Poder Legislativo del estado restituir al Instituto de Ecología la custodia del predio, al considerar que el INECOL cuenta con personal, capacidad técnica, científica y administrativa para garantizar la preservación de la reserva, misma que almacena 504 millones de litros de agua al año y 9 mil 800 toneladas de bióxido de carbono, además de ser el hogar de especies en peligro de extinción, aves migratorias y diversas especies de hongos.
Guillermo Rodríguez Curiel, miembro de LAVIDA catalogó como despojo el salvoconducto acordado por los legisladores.
Advirtió que pelearán porque esta área protegida siga siendo pública y patrimonio natural de los veracruzanos.
Con la donación se quebranta el decreto oficial del 27 de noviembre de 1975 emitido por el entonces gobernador Rafael Hernández Ochoa, donde se expropia el Rancho Guadalupe, para que sea destinado exclusivamente a la conservación del Bosque de Niebla, que no puede ser objeto de enajenación.
Dentro de dicho decreto se establece que el terreno de 30 hectáreas pasaba a ser parte del Jardín Botánico y del parque Francisco Javier Clavijero, ubicados al lado de dicho Jardín Botánico.
Desde hace dos años el INECOL, junto con grupos ambientalistas trabajaban recabando fondos para adquirir incluso 20 hectáreas aledañas al Bosque de Niebla, amenazados por el crecimiento de la mancha urbana de la capital del estado.
Para ello, organizaron subastas de obras donadas por artistas, conciertos, conferencias, recorridos, que permitan juntar lo que necesitan para adquirir los terrenos, sin embargo ahora no solo no adquirirán los otros terrenos, sino que le quitaron el que ya tenían a cargo.
El predio entregado se localiza en la comunidad de La Haya en Xalapa, en la carretera antigua a Coatepec.
Luego de la adjudicación, el Instituto de Ecología se desligó del boque azul de montaña o boque de niebla, y avaló que fuera donado a Pronatura y al Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza a fin de que entre el terreno se construyan oficinas y un clúster ambiental.