Journey llega a Ciudad de México después de una exitosa primera fecha en Monterrey; la agrupación oriunda de San Francisco cuenta con un gran número de seguidores en nuestro país y este viernes todos tuvieron cita en la Arena Ciudad de México.
Ambiente dentro y fuera del recinto. Desde antes de las 20:00 horas, la Arena comenzó a llenarse de espectadores de todas las edades. Jóvenes, padres e hijos, familias completas y grupos de adultos constituyeron el cuórum de fanáticos que se reunieron para escuchar algunos de los éxitos más grandes de la legendaria banda.
Aunque la indumentaria general de los asistentes destacó por ser heterogénea, uno de los elementos que más se hicieron presentes fueron las distintas playeras representativas de las presentaciones de Journey en México y alrededor del mundo. Todd Jensen, Deen Castronovo, Jonathan Cain, Neal Schon, Jason Derlatka y Arnel Pineda, Journey, tomaron el escenario poco después de las 21:00 horas.
Con canciones como “Only the Young”, “Stone in love” y “Lights” la banda incendió el ánimo de los asistentes, pero, sin duda, el momento más destacable (y uno de los más esperados) de esta primer parte del concierto fue la interpretación de la enigmática canción “Don’t stop believin’”, la cual se coreó en cada rincón de la Arena.
“¡Aplaudan!”, pidió Arnel Pineda, quien desde hace unos años tomó el lugar del mítico Steve Perry como vocalista d la agrupación, durante “Stone in Love” a todo el público mexicano que, de pie, se entregó al vocalista filipino y la música de Journey.
“Ciudad de México, gracias por tenernos de regreso, amamos aquí y ha pasado mucho tiempo... Me gustaría llevarlos a mi ciudad, San Francisco”, dijo Neal Schon antes de tocar temas como “Send her my love”, “Dead or alive” y “Mother, Father”.
Un momento especial fue cuando Arnel Pineda presentó “Let it rain”, una nueva canción del grupo, la cual forma parte de su nuevo álbum Freedom.
Los potentes solos de guitarra de Neal Schon, la cualidad interpretativa de Jonathan Cain en el piano y la poderosa voz de Arnel Pineda son tres factores que siempre destacan en las presentaciones de Journey. Pero algo que siempre ha distinguido a la banda estadunidense son las canciones con las que hacen cantar a cada recinto que visitan, himnos que se han convertido en un pedazo imborrable de la historia de la música.
En ese sentido, “Who’s Cryin’ Now?”, “Open Arms” y, por supuesto, “Faithfully” se colocaron como los momentos más memorables de la noche, así como los más coreados.
El grupo se despidió de la Arena Ciudad de México después de casi dos horas de concierto y un setlist de diecisiete temas. Journey terminó su último concierto en México al ritmo de “Separate Ways” y “Any Way You Want It”, una de sus canciones más populares y, sin duda, uno de los temas más importantes del rock de todos los tiempos.
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